En una operación cerrada, con información proporcionada por Estados Unidos y verificada por la Marina, las fuerzas federales iniciaron un golpe, desde el viernes pasado, a una de las principales células de trasiego de drogas vinculadas al Cártel del Pacífico, que se calcula lograba introducir al mercado del norte “decenas de toneladas” de heroína, marihuana, cocaína y metanfetaminas.
Aunque se pretendía detener a por lo menos 15 de los principales integrantes de este grupo dedicado a la importación, almacenamiento y traslado a Estados Unidos de los enervantes, hasta ahora sólo se logró la captura de siete personas, entre ellas Mario Hidalgo Argüello, identificado responsable de la célula.
Hidalgo, según lo revelado ayer por la Procuraduría General de la República (PGR) era del “primer círculo” del cártel y actuaba bajo mando directo del narcotraficante Ismael El Mayo Zambada.
Funcionarios de primer nivel explicaron que la función principal de esta célula era el trasiego de droga escondida entre frutas y enseres domésticos a través de la frontera norte.
De acuerdo a la información de inteligencia que recabaron, la célula tenía la capacidad de negociar directamente la compra de la droga en Colombia, importarla a México, almacenarla, preparar su trasiego en contenedores en barco o por carretera, entregarla a sus contactos en Estados Unidos y regresar a México con el dinero para ser blanqueado.
Esta operación, explicaron, aún no concluye y con datos obtenidos en los lugares cateados se ampliará a por lo menos tres inmuebles más en estos días.
“Se trata de una operación que sigue en desarrollo, se han cateado dos domicilios pero se van a verificar más. De momento no hay más personas aprehendidas pero el asunto se está trabajando desde el viernes pasado”, dijo ayer el director de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón de Lucio.
Los investigadores buscarán documentar la complicidad con empresas que transportaban los productos que escondían la droga y en donde blanqueaban su dinero.
Al referirse al Cártel del Pacífico, las fuentes dijeron que esta célula era una de las más eficientes, que se calcula tenía por lo menos cinco años operando y que proporcionaba “millones de dólares mensuales” a la organización de Ismael Zambada García, El Mayo, pero también trabajaba para Joaquín Guzmán Loera, El Chapo.
Primer círculo
La PGR subrayó ayer que los operativos realizados en los últimos días entre la AIC y fuerzas especiales de la Marina en Sinaloa, representan golpes a la estructura operativa bajo mando directo de El Mayo.
Los dos detenidos del lunes, identificados como Mario Hidalgo Argüello y Mario López Osorio, forman parte de primer círculo de Zambada García.
Su detención, confirmó el jefe de la AIC, es la continuación de una acción que inicio el viernes pasado en Culiacán y que derivó en la captura de otras cinco personas, entre ellos Joel Enrique Sandoval Romero alias “El 19”, responsable de coordinar la seguridad del capo.
Narcotúneles automatizados
Zerón de Lucio confirmó que los operativos realizados en la colonia Libertad, en Culiacán, permitieron desarticular un “centro operativo” del Cártel de Sinaloa y el cual contaba incluso con túneles de acceso automatizado.
“En dos de los domicilios se localizaron ocultos túneles debajo de tinas de baño que tienen un sistema de apertura automatizado que conducen a una escotilla, y que a su vez comunican con el sistema de desagüe pluvial de la ciudad”, dijo el funcionario.
Zerón dijo que estos túneles eran utilizados tanto como un sistema de escape así como de transportación de productos ilícitos.
Además de los túneles se encontraron en las instalaciones cateadas un lanzacohetes tipo RPG con dos ojivas útiles, cinco armas largas y dos armas cortas, cuatro granadas de fragmentación mil cartuchos útiles de distintos calibres, tres vehículos de lujo y tres más blindados.
Dato
500 policías y 410 elementos de las Armada de México catearon ayer en la tarde el penal local de Mazatlán para tratar de localizar armas y droga