Las redes sociales ya cuentan con un detector de mentiras.
Con el fin de comprobar la veracidad de todo lo que se afirma en redes sociales, el detector de mentiras está destinado a ayudar a los periodistas, agencias gubernamentales, servicios de emergencia o al sector privado para reaccionar de manera más eficaz a partir de la información que se comparte en la red.
Este proyecto llamado Pheme es financiado por la UE y encabezado por un grupo de investigadores de la Universidad de Sheffield en Reino Unido.
Se busca clasificar los rumores de Internet en cuatro categorías: especulación, controversia e información errónea que se divulga no intencionalmente y desinformación.
También se quiere categorizar automáticamente las fuentes de información para evaluar la credibilidad de la agencias de noticias, periodistas independientes, expertos o fuentes robóticas.
Además los investigadores buscarán fuentes que confirmen o desmienten la información y mostrará la evolución de las conversaiones en la red social, ya sea Twitter, Facebook u otro, para llegar a conclusiones de credibilidad de la información.
Los resultados aparecerán en un tablero visual del usuario para darle a entender si se trata de un rumor o de una noticia verídica.