LAGOS. Al menos 29 estudiantes murieron en un supuesto ataque del grupo radical islámico Boko Haram a una escuela pública de educación secundaria en la población nigeriana de Buri-Yadi, en el nordeste del país.
Según informan hoy los medios locales, el ataque se produjo anoche, y los asaltantes mataron a los alumnos con armas blancas en lugar de con pistolas, como habitualmente hacen, para evitar llamar la atención.
Después de asesinarlos incendiaron la escuela, que también servía de residencia para los estudiantes.
La población se encuentra en Yobe, uno de los tres estados nigerianos que se encuentran bajo emergencia oficial por los frecuentes ataques de Boko Haram.
El grupo, cuyo nombre significa en lenguas locales “la educación no islámica es pecado“, lucha por imponer la “sharía” o ley islámica en Nigeria, de mayoría musulmana en el norte y predominantemente cristiana en el sur.
Desde 2009, cuando la Policía acabó con el líder de Boko Haram, Mohamed Yusuf, los radicales mantienen una sangrienta campaña que ha causado más de tres mil muertos, según las cifras que maneja el Ejército nigeriano.
Con unos 170 millones de habitantes integrados en más de 200 grupos tribales, Nigeria, el país más poblado de África, sufre múltiples tensiones por sus profundas diferencias políticas, socioeconómicas, religiosas y territoriales.