LONDRES. El mismo día que un palestino murió durante una operación militar en la localidad de Bir Zeit, en Cisjordania ocupada, y otros tres han resultado heridos en enfrentamientos con soldados israelíes en la ciudad de Nablus. Amnistía internacional (AI) presentó el informe “Gatillo fácil” en el que documenta los abusos del Ejército y la Policía israelíes que han matado con total impunidad a decenas de civiles palestinos, incluidos menores.

 

Según cifras de Naciones Unidas, al menos 45 palestinos han muerto en la franja cisjordana a manos de las fuerzas de seguridad israelíes desde 2011 y fallecieron más el año pasado que durante 2011 y 2012 juntos.

 

Amnistía añade que ha documentado por su parte el asesinato de al menos 22 civiles palestinos en Cisjordania el año pasado, la mayoría menores de 25 años, de los cuales al menos catorce fallecieron durante protestas y al menos cuatro eran niños.

 

Entre los muertos y heridos había manifestantes pacíficos, transeúntes, activistas de derechos humanos y periodistas, quienes no parecían plantear “una amenaza directa o inmediata a la vida” y en algunos casos hay incluso pruebas de asesinatos indiscriminados, lo que equivaldría a crímenes de guerra, señala AI.

 

“Este informe presenta pruebas que revelan una horrorosa pauta de muertes ilegales y ataques indiscriminados de civiles palestinos por parte de las fuerzas israelíes en Cisjordania”, declara el director del programa para Oriente Medio y norte de África, Philip Luther.

 

“La frecuencia y persistencia del abuso excesivo y arbitrario de la fuerza contra manifestantes pacíficos en Cisjordania por soldados y policías israelíes -y la impunidad de que disfrutan los autores- sugieren que se efectúa como parte de una política”, agrega.

 

Según el informe, en los últimos tres años al menos 261 palestinos, 67 de ellos niños, han resultado heridos de gravedad con arma de fuego, mientras que más de 8 mil 500 (mil 500 de ellos menores) lo han sido con otro tipo de armas, como balas de metal forradas de goma o gas lacrimógeno.

 

“El impactante número de heridos es un recordatorio del incesante peligro que afrontan a diario los palestinos que viven en la franja de Cisjordania”, afirmó Luther.

 

Varias personas fueron disparadas por la espalda, lo que, según el director del programa de Oriente Medio y norte de África, sugiere que estaban huyendo y no suponían ninguna amenaza contra las fuerzas israelíes.

 

En otras ocasiones, los soldados dispararon contra personas que simplemente tiraban piedras.

 

Luther denuncia que las investigaciones llevadas a cabo sobre muertes sospechosas por parte de Israel ponen de manifiesto un sistema “tristemente inadecuado”.

 

“No es independiente ni imparcial y carece de toda transparencia”, advierte el portavoz de AI, quien insta a las autoridades del Estado judío a efectuar investigaciones “rápidas y rigurosas” sobre presuntos abusos por parte de las fuerzas de seguridad.

 

Amnistía recuerda que en los últimos años Cisjordania ha sido escenario de numerosas protestas contra la prolongada ocupación israelí y las prácticas represivas de las fuerzas de ocupación.

 

Estas incluyen, precisa, la expansión ilegal de los asentamientos, el muro de separación de 800 kilómetros de longitud, derribos de viviendas y desahucios, controles y chequeos militares y restricción de movimientos y discriminación de los palestinos frente a los colonos.

 

Las protestas -apunta AI- también se llevan a cabo en contra de la detención de miles de palestinos y como respuesta a los ataques militares de Israel en Gaza y por la muerte de civiles en las manifestaciones y en redadas.

 

Amnistía pide a las autoridades israelíes que ordenen a las fuerzas de seguridad “refrenarse de usar fuerza letal” a no ser que exista amenaza a su vida y respetar el derecho de los palestinos a la manifestación pacífica.

 

La organización insta a Estados Unidos, a la Unión Europea y al resto de la comunidad internacional, a que suspenda todas las transferencias de municiones, armas y otros equipos a Israel.

 

Ayer falleció un palestino en la localidad de Bir Zeit, próxima a Ramala, en Cisjordania ocupada. Los hechos comenzaron a temprana hora a cuando cerca de 30 jeeps militares israelíes hicieron una incursión en Bir Zeit, para arrestar a Moataz Awad Washaha, de 24 años, sospechoso de “actividad terrorista”.

 

Además, tres palestinos han resultado heridos a primera hora de la mañana en enfrentamientos con soldados israelíes en la ciudad norteña de Nablus.