El camino hacia la independencia energética de Estados Unidos, posible con la producción de petróleo y gas shale, será más difícil que lo esperado, ya que los productores independientes deben invertir este año 1.50 dólar en perforación por cada dólar que gana.
De acuerdo con la agencia de noticias financieras Bloomberg, la producción de gas shale cae más rápido que la producción de combustibles convencionales y se necesitaría dos 500 nuevos pozos al año para mantener una producción de un millón de barriles diarios en la formación geológica de esquisto (shale en inglés), Bakken en Dakota del Norte.
La Agencia Internacional de Energía, con sede en París, afirma que Irak podría hacer lo mismo con sólo 60 pozos.
Las empresas perforadoras están presionando para mantener el ritmo de producción petrolera que aumentó 39% en Estados Unidos desde finales de 2011.
Sin embargo, el logro de la autosuficiencia energética de EU depende del crédito y de los precios del petróleo suficientemente altos para que las empresas puedan cubrir sus costos de producción. Incluso, a pesar de que el crudo se vende por encima de los 100 dólares el barril, los productores de shale gastan dinero más rápido que lo que le genera dicho combustible.
“Estamos empezando a vivir en un mundo diferente donde conseguir más petróleo necesita más energía, más esfuerzo y costará más caro”, dijo a Bloomberg Tad Patzek, director del Departamento de Petróleo e Ingeniería en Geosistemas de la Universidad de Texas en Austin.
Y es que la industria petrolera estadunidense debe apresurarse para mantener su estabilidad, dice la nota de la agencia financiera.
Las perforadoras petroleras y gaseras prevén invertir más de 2.8 billones de dólares para el 2035 aunque la producción llegará a su punto máximo una década antes, estima la Agencia Internacional de Energía.
Mientras tanto, el Medio Oriente invertirá menos de un tercio de lo que gastará Estados Unidos para producir tres veces más petróleo.