RÍO DE JANEIRO. El carnaval de Brasil llegó hoy a su último día con desfiles de comparsas callejeras que aún resisten a dejar los festejos y mantienen la fiesta por todo el país, después de que el sambódromo de Río de Janeiro, con los pomposos desfiles de las escuelas de samba, bajó el telón en la madrugada.
Los casi cinco días del carnaval, que se celebra en todo el país, pusieron este martes su punto final con los “bloques” callejeros, muy tradicionales y en muchos casos hasta centenarios en ciudades como Río de Janeiro, Sao Paulo, Salvador, Belo Horizonte, Recife, Ouro Preto (Minas Gerais) y Olinda (Pernambuco), entre otros.
En Olinda, ciudad próxima a Recife, la capital regional, se celebró este martes el 14° Encuentro de Muñecos Gigantes, en el que miles de personas desfilaron detrás de una centena de gigantescos personajes.
El encuentro homenajeó este año a muñecos gigantes que forman parte de la tradición en el carnaval de Olinda, como O Menino da Tarde, que completó cuarenta años de comparsas y estuvo acompañado por el Homem da Meia Noite y el muñeco del bloque John Travolta, que celebró 35 anos de desfiles callejeros.
El bloque A Corda, famoso por no dejar dormir a las personas durante el martes de carnaval, se tomó con su bullicio en la madrugada de hoy las laderas del centro de Olinda.
En la vecina Recife, en tanto, se celebró la versión infantil del tradicional Galo da Madrugada, un bloque que el sábado reunió más de un millón de personas y se consolidad cada vez más como uno de los principales del país.
Otra de las capitales del Nordeste, Salvador, en el estado de Bahía, vivió con una mezcla de alegría y nostalgia el último día del carnaval y centenas de personas se sumaron hoy nuevamente a los “tríos eléctricos”, como se conocen a los gigantescos carros de sonido animados por artistas como Claudia Leite e Ivete Sangalo.
En Río de Janeiro, que bajó esta madrugada el telón del sambódromo Marqués de Sapucaí, Zico, la mayor figura de la selección brasileña en los años ochenta, coronó el desfile de la escuela de samba Imperatriz Leopoldinense en la noche grande del carnaval, que otra vez se vistió de fútbol a tres meses del inicio del Mundial.
El propio Zico y otras figuras legendarias del fútbol brasileño, como Roberto Rivelino, ídolo en los años setenta y de quien el homenajeado heredó la mítica camiseta “10” verde amarela, y Júnior, su gran compañero en el Flamengo y en la “canarinha”, subieron a las carrozas de la escuela.
En el sambódromo Anhembí, de Sao Paulo, el fútbol tampoco fue ajeno al espíritu carnavalesco y la escuela Leandro de Itaquera homenajeó al mundo del balón, mientras que Gavioes da Fiel, formada por seguidores del Corinthians, se inspiró para sus comparsas en Ronaldo “Fenómeno”.
Al final, en el carnaval paulista, que completó este año su centenario, un homenaje a la fe y a la religiosidad de los pueblos llevado a las carrozas, disfraces y comparsas le otorgó hoy a la escuela de samba Mocidade Alegre el título de campeona del Grupo Especial.
Mocidade Alegre sumó así su tercer título consecutivo y el sexto en su historia dentro del carnaval de la mayor ciudad brasileña.
Las escuelas de elite de Sao Paulo desfilaron como lo hacen tradicionalmente el viernes y el sábado del carnaval que se celebra en todo el país, al tiempo que las del Grupo de Acceso lo hacían en Río de Janeiro y el domingo y lunes se invirtieron el protagonismo, con el Grupo Especial carioca y las aspirantes paulistas.
La escuela vencedora del Carnaval de Río se conocerá este miércoles cuando se lean los votos de los jurados en el sambódromo Marqués de Sapucaí.