KIEV. Dos regimientos ucranianos reportaron como “perdidos” parte de sus misiles antiaéreos portátiles Igla, armas de alto alcance y que podría resultar altamente peligrosas si caen en manos de terrositas, por lo que el mando militar del país intenta ocultar el hecho.

 

 

De acuerdo con información de la agencia rusa RIA Novosti, el robo de una cantidad no concretada de estos peligrosos sistemas se registró en el regimiento aerotransportado Nº 80, que dispone de 54 misiles de este tipo, así como en la brigada móvil Nº 27, acuartelada a 45 kilómetros de la ciudad de Lvov, la más importante en el oeste del país.

 

 

Según un oficial anónimo del Ministerio de Defensa ucraniano, el nuevo mando está tomando medidas urgentes para “camuflar esta difícil situación”, reemplazando las armas perdidas por unidades viejas y que requieren de una modernización.

 

 

Más tarde surgió información de que este lote de armas habría podido ir a parar a manos de rebeldes sirios