El gobierno de Enrique Peña Nieto tienen necesidades de financiamiento por 9.3% del Producto Interno Bruto (PIB) en 2014, el cual usará para financiar los déficits fiscales y refinanciar las deudas existentes, estima Fitch Ratings.
“Las necesidades de financiamiento excederán 9% del PIB en Argentina, Brasil, Costa Rica y México. Estos países enfrentan déficits y amortizaciones de deuda más altos debido a sus políticas fiscales expansivas y su dependencia en el financiamiento de corto plazo”, señala la agencia de calificación.
Según el informe especial Necesidades de financiamiento de soberanos latinoamericanos en 2014: Impulsadas por mayores déficits fiscales, México y Brasil, las dos economías más grandes de Latinoamérica, serán las mayores contribuyentes al deterioro fiscal en 2014.
“En México, la debilidad del crecimiento económico en 2013 y el posible impacto adverso de la reforma tributaria recientemente introducida llevó al gobierno a incluir un paquete de estímulo fiscal en el presupuesto de 2014”, comenta.
La calificadora dice que los gastos relacionados con las elecciones de este año, un crecimiento moderado en los ingresos fiscales y una carga de pago de intereses creciente presionarán las finanzas públicas en Brasil.
Para este año, los gobiernos latinoamericanos necesitarán emitir 491mil millones de dólares para financiar déficits fiscales y refinanciar deudas existentes, lo cual representa un alza del 9% comparado con 2013, añade.
“El incremento se deberá principalmente a la expansión en los déficits fiscales, compensado por una leve caída en las amortizaciones de deuda”, explica Fitch Ratings.
Detalla que las necesidades de financiamiento podrían alcanzar 8.4% del PIB regional en 2014, comparado con el 8.2% promedio registrado durante 2012-2013.
“Aquellos exportadores de materias primas que muestran una trayectoria de manejo fiscal prudente tendrán los requerimientos de financiamiento más bajos en 2014. Bolivia, Chile, Guatemala, Paraguay, Perú y Uruguay se destacan por sus necesidades de fondeo bajas, las cuales alcanzan menos de la mitad de la mediana latinoamericana de 6.1% del PIB”, agrega.