El titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Jorge Carlos Ramírez Marín, supervisó los terrenos donde se reubicarán y construirán poco más de 900 viviendas en Chilpancingo, Guerrero.
Ello, a fin de que familias afectadas por el paso de la tormenta tropical “Manuel”, queden asentadas en un lugar seguro y digno, de acuerdo con un comunicado de la dependencia.
Informó que en una primera etapa se construirán 252 viviendas apoyadas por el Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden), además de 214 viviendas por el Fideicomiso Provivah.
El objetivo del gobierno federal, reiteró Marín, es acelerar la edificación de las viviendas, antes del inicio de la temporada de lluvias, por lo que se entregarán cuanto antes los hogares a las familias afectadas.
Precisó que son mil 150 las personas de Chilpancingo que se reubicarán, ya que habitan en zonas de riesgo o en zonas federales prohibidas
En ese sentido, ante el compromiso que tiene el Gobierno de la República con quienes resultaron afectados en Chilpancingo -dijo-, las casas tendrán un costo de 120 mil pesos, los cuales garantizan dos recámaras, cuarto de usos múltiples, baño completo, piso y loza de concreto, muros de block y estructura de acero.
De gira por Acapulco, Guerrero, el titular de la Sedatu destacó que la dependencia invertirá más dos mil millones de pesos para reconstruir vivienda en la Costa Chica, Costa Grande, la montaña, en Tierra Caliente y en la zona Centro de Guerrero.
Aseguró que el gobierno de la República continuará apoyando a los mexicanos no sólo cuando ocurran desgracias o en emergencia, y en el caso particular de Acapulco el rescate es una tarea nacional.
Asimismo, señaló que en el presente año la Secretaría destinará al estado 215 millones de pesos a través de los programas Hábitat y Rescate de Espacios Públicos.