El joven Alan, portero de la filial Sub 17 de los Tiburones Rojos de Veracruz, y su amigo Eliacim Caldelas Morales fueron ejecutados en el municipio de Medellín de Bravo, cuando intentaban negociar con un grupo de secuestradores que tenían en su poder al hermano del futbolista.
De acuerdo con reportes locales, Alan Quevedo, de 16 años, ingresó a los Tiburones Rojos de Veracruz en días recientes, mientras que Eliacim Caldelas era un joven empresario transportista, quien hace algunos años representó a Veracruz en la disciplina del taekwondo.
Ambos fueron privados de la vida ayer en el fraccionamiento Arboledas San Ramón, en el referido municipio, conurbado con el puerto de Veracruz.
El director técnico de los Tiburones Rojos, José Luis Sánchez Solá, conocido como “Chelis”, señaló que “al final de cuentas es una muerte, como que no haces mucho caso de por qué fue, pero si vas a agarrar y ves por qué fue, dices ‘qué tristeza, no fue enfermedad, no fue accidente, está cañón, está cañón y no veo que nadie haga nada”.
Y agregó: “Ayer veía, 120 mil millones de pesos se consumen en corrupción en este país, ¿qué harías? ¿Cómo podrías educar o repartir? ¿Qué fuentes de trabajo podrías dar? ¿Qué maravillas podrías hacer? si fueran bien empleados esos 120 mil millones de pesos, no pasaría lo que pasó; a lo mejor a mi hija sí le roban por el lugar geográfico en el que vive, pero sí está cañón eso”.