Simferópol. La tensión en las unidades militares crimeas ha aumentado durante el martes tras el ingreso de la república en la Federación Rusa con la muerte de un soldado ucraniano durante un tiroteo en la capital crimea.

 

El portavoz del Ministerio de Defensa de Ucrania, Vladislav Selezniov, declaró en directo a la televisión ucraniana que un suboficial ucraniano murió por disparos en el pecho y en el cuello durante el asalto al centro de cartografía y topografía militar en Simferópol.

 

Selezniov acusó a soldados ataviados con uniformes rusos, aunque sin distintivo, de herir a otro militar, detener al oficial de mayor rango de la unidad y requisar el dinero y los documentos a todos los militares ucranianos.

 

Mientras, según las fuerzas de seguridad crimeas, uno de los efectivos de las milicias de autodefensa murió y otros dos resultaron heridos en el tiroteo que se desató en las inmediaciones de la unidad en el centro de Simferópol.

 

Como pudo constatar Efe, la unidad está ahora bloqueada por miembros de las milicias de autodefensa, que impiden el acceso tanto de civiles como de periodistas, que se concentraron en la calle adyacente.

 

Tras este incidente, el Ministerio de Defensa ucraniano autorizó el uso de armas a sus soldados, que según fuentes rusas superaban al principio de la crisis los 22.000.

 

El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, aseguró tras la firma de la integración de Crimea y Sebastopol en la Federación Rusa, que los militares ucranianos destacados en la península tienen sólo dos opciones.

 

“Deben elegir. Pueden sumarse a los soldados de Crimea que se integrarán en el Ejército ruso o, si así lo desean, abandonar el territorio de Crimea”, dijo.

 

Peskov aseguró también que Rusia tiene conocimiento de que en la península se preparan provocaciones por parte de Kiev, denuncia que fue secundada por las autoridades crimeas.

 

Al respecto, el primer presidente de la Ucrania independiente, Leonid Kravchuk, manifestó en un programa de televisión que los militares ucranianos deben ser replegados, ya que Crimea está ahora bajo el control de Moscú.

 

El presidente ruso, Vladímir Putin, había elogiado hoy a los soldados ucranianos por mantener la calma y no recurrir a la fuerza durante la crisis, en la que hasta hoy no había muerto ni una sola persona.