Pemex incurrió en irregularidades en la asignación de contratos a Oceanografía, por ejemplo, condonándole multas por obras incumplidas y permitiéndole operar con embarcaciones de menor tamaño a las requeridas por la paraestatal.
Debido a algunas deficiencias detectadas en las obras realizadas por la empresa de Amado Yáñez, en 2008 la Auditoría Superior de la Federación (ASF) ordenó a Petróleos Mexicanos, mediante el oficio SFP/LX/061/2008 25/01/2008, revisar la totalidad de los contratos.
Sin embargo, la paraestatal hizo caso omiso a la advertencia del órgano fiscalizador y siguió otorgando licitaciones a la empresa, vinculada a altos funcionarios del PAN, como Juan Camilo Mouriño, ex secretario de Gobernación durante el sexenio de Felipe Calderón y fallecido en 2008 en un accidente aéreo en la capital del país, o César Nava, ex secretario particular de la Presidencia en el misma administración.
Modificaciones a modo
La ASF detectó que Pemex modificó las especificaciones técnicas de las licitaciones, pese a que otras empresas inscritas cumplían con ellas, para que Oceanografía llevara a cabo obras de saneamiento en las instalaciones del Golfo de México.
Uno de los ejemplos es la licitación 18575108-08-04, ganada en 2004 por el corporativo de Amado Yáñez para la “inspección, mantenimiento y protección anticorrosiva con apoyo de un barco taller a instalaciones de exportación de petróleo en las terminales marítimas de Dos Bocas, Tabasco; Cayo Arcas, Campeche, y en el Golfo de México”.
El trabajo se pactó en 208 millones de pesos y 17 millones de dólares; sin embargo, la auditoría concluyó que los funcionarios de Pemex modificaron las bases de la licitación Internacional para favorecer a la empresa, con base en Ciudad del Carmen, Campeche.
De acuerdo con el oficio OSA-DC/GAC-012/05, las especificaciones técnicas señalaban que se requería una embarcación que navegará a 14 nudos, y aunque varias empresas cumplieron con el requisito, días después fue modificado a 12 nudos para que Oceanografía pudiera inscribirse.
Y así la empresa se hizo de un contrato de 208 millones de pesos sin contar con los requerimientos técnicos de las embarcaciones para darle mantenimiento a las instalaciones de Pemex en el Golfo de México.
En ese momento, la ASF exigió a Pemex, en específico a Carlos Morales Gil, director de Exploración y Producción, investigar a los funcionarios que por causas injustificadas modificaron las licitaciones a través de “negociaciones con los licitantes”.
Se solicitó realizar “las investigaciones pertinentes y, en su caso, iniciar el procedimiento administrativo para el fincamiento de posibles responsabilidades administrativas sancionatorias, derivadas de actos y omisiones de los servidores públicos que en su gestión modificaron las bases de licitación pública” durante la administración foxista.
Le perdonan multa
El atraso en la ejecución de obras es otra situación que Pemex permitió a Oceanografía sin que hubiera las penalizaciones marcadas en los contratos y las multas impuestas por la auditoría no fueron aplicadas.
Por ejemplo, en 2005 determinaron una multa por 405 millones de pesos por el retraso en diversas obras. La ASF constató que Pemex no cobró la multa y aunque la empresa estaba señalada, le siguió adjudicando contratos hasta ganar más de 46 mil millones de pesos durante los últimos 12 años.
Otras de las anomalías fue detectada en las fianzas que Oceanografía que debió pagar como ganadora de diversas obras, el ente fiscalizador halló que eran mucho menores a las estipuladas, las cuales causaron un desfalco a la Hacienda Pública por 137 millones de pesos tan sólo entre 2010 y 2012.