MOSCÚ. El viceprimer ministro ruso, Dmitri Rogozin, reaccionó con ironía ante la decisión del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, de congelar sus activos y prohibirle la entrada en ese país como castigo por el referéndum celebrado el domingo en Crimea, con un voto mayoritario a favor de su adhesión a Rusia.

 

“Señor Obama, ¿y qué deben hacer los que no tienen ni cuentas ni propiedades en el extranjero? ¿O no lo ha pensado usted? Me da la impresión de que el decreto del presidente de EU lo redactó algún bromista”, escribió Rogozin en su cuenta de Twitter.

 

El número dos del Gobierno, encargado de la industria militar, exvicepresidente de la Duma (Cámara de Diputados) y exembajador de Rusia ante la OTAN, añadió en tono sarcástico: “Por fin me ha llegado el reconocimiento mundial”.

 

Por su parte, la presidenta del Senado, Valentina Matvienko, acusó a Estados Unidos de “chantaje político” por adoptar sanciones contra ella y otros altos cargos del país.

 

“Las sanciones contra los más altos cargos (rusos), que cumplen funciones de Estado, es una decisión sin precedentes. No hubo nada igual ni siquiera en tiempos de la guerra fría. Si llamamos las cosas por su nombre, es chantaje político”, dijo a los periodistas la número tres en la jerarquía política rusa.

 

“En Estados Unidos saben perfectamente que no tengo ni cuentas, ni activos ni propiedades en el extranjero”, afirmó Matviénko, quien aseguró que ninguna sanción le hará cambiar de opinión.

 

Según Matvienko, “he defendido y seguiré defendiendo los intereses de Rusia, y no los intereses geopolíticos de Occidente. Nadie logrará asustarnos con ninguna amenaza”.

 

La presidente del Senado advirtió de que las sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea contra Rusia serán contraproducentes.

 

Otro de los sancionados por Washington, el senador ruso Andréi Klishas, aseguró a la agencia Interfax que para él “no es ninguna tragedia” el castigo de EU.

 

“Me complace el grupo de gente que me acompaña” en la lista de sancionados, dijo el senador.

 

El primer ministro de la región autónoma de Crimea, Serguei Aksionov, del que Washington dice que se ha “autoproclamado” líder y “ha rechazado la autoridad legítima del gobierno de Kiev”, también fue sancionado. Junto a Aksionov, el presidente del parlamento crimeo, Vladímir Konstantinov, también fue castigado por haber sido el artífice de la declaración de independencia de la región del pasado 11 de marzo, cuando rechazaron la legitimidad de Kiev y permitieron que tropas comandadas por Moscú aislaran toda la península de Crimea.

 

También está sujeto a sanciones uno de los hombres más poderosos de Ucrania y amigo personal del presidente ruso, Vladimir Putin: Víktor Medvedchuck, líder de un movimiento político a favor de estrechar las relaciones con Rusia, al que Estados Unidos acusa de ayudar material y financieramente a Yanukóvich y haber liderado acciones contra la oposición proeuropea durante la crisis.

 

Entre los rusos sancionados también están Vladislav Surkov y Serguéi Gláziev, asesores del presidente Vladímir Putin.

 

La lista de sancionados se completa con los nombres de dos líderes separatistas de Crimea, Serguéi Axiónov y Vladímir Konstantínov jefes del Ejecutivo y del Legislativo de la república, y del expresidente ucraniano Víctor Yanukóvich, derrocado después de tres meses de protestas populares callejeras.

 

Por su parte, los ministros de Exteriores de la Unión Europea (UE) acordaron hoy sancionar a veintiún rusos y ucranianos considerados responsables de la inestabilidad en Crimea.