OAXACA. El gobierno de Oaxaca condenó hoy la agresión que cometieron normalistas a centros comerciales y calificó el hecho como “inadmisible, que no puede ni debe ser concebido como un acto legítimo de expresión de inconformidad”.

 

En un comunicado, la administración estatal agregó que el comportameinto de los normalistas se inscribe en el rubro de “delito grave”, que atenta contra la paz social y subrayó que será investigado, perseguido y castigado por las autoridades competentes.

 

Los hechos ocurrieron aproximadamente a las 13:45 horas, cuando un grupo de normalistas embozados, con bombas molotov, tubos y petardos en mano, irrumpió en los centros comerciales de Plaza del Valle y Plaza Oaxaca, ubicados al sur de la capital oaxaqueña.

 

Indicó que elementos la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) realizan las indagatorias para deslindar responsabilidades e identificar a los autores materiales del vandalismo, a partir de imágenes fotográficas y material fílmico.

 

Personal de la dependencia, en colaboración de la Secretaría de Seguridad Pública, desplegó en un operativo de disuasión y vigilancia, en el cual participan 300 elementos policíacos para resguardar la zona.

 

El comunicado destacó que el gobierno de Oaxaca ha mantenido diálogo permanente con normalistas, atendiendo las demandas y tomando en cuenta lo establecido en las leyes.

 

“Por ello, resultan reprobables e inadmisibles los referidos hechos de presión, que en nada contribuyen a la conciliación de intereses y el logro de acuerdos, toda vez que sólo generan zozobra y crispación social”, reiteró.

 

Foto: Dario Nolasco | ADN Sureste

 

Jaloneos entre normalistas y prensa

 

Un numeroso grupo de futuros maestros arremetieron esta tarde con tiendas departamentales en Plaza Oaxaca en la capital del estado.

 

Esta tarde hubo empujones con los reporteros que cubren sus manifestaciones, los alumnos se liaron casi a golpes con fotógrafos frente a las instalaciones de la tienda Soriana, donde los estudiantes se apoderaron de los carritos del súper, los destruyeron y aventaron los palos contra los policías que llegaron al sitio, pero que solo los conminaron a retirarse.

 

Mientras esto ocurría, los empleados quedaron atrapados sin poder salir de los comercios.

 

 

Foto: Dario Nolasco | ADN Sureste