El actor Russell Crowe y los realizadores de la superproducción de Hollywood “Noah”, (“Noé”) asistieron a la audiencia general del papa Francisco pero no lograron reunirse con él.

 

Crowe había presionado fuertemente por una audiencia y el apoyo papal para su filme y la publicidad que una posible foto con el sumo pontífice significaría. La película ha sido prohibida en gran parte del mundo musulmán porque representa al profeta, mientras que estadounidenses conservadores se han quejado de que se toma libertades en la representación bíblica del diluvio.

 

El vocero del Vaticano, reverendo Federico Lombardi, dijo que los productores de “Noah” habían solicitado una reunión en privado que les fue denegada. En un correo electrónico a la agencia de noticias, Associated Press, Lombardi dijo que de manera similar no había reunión prevista tras la audiencia general del miércoles, cuando los personajes importantes suelen conseguir hablar brevemente con el papa.