“Colosio era un político de facultades superiores a lo que aparentaba y eso lo hubiera demostrado en el momento en que llegara a la Presidencia”, aseguró Héctor Aguilar Camín al hablar de su texto novela-no ficción basado en el expediente de la última investigación sobre la ejecución del que era candidato presidencial priista, publicado en la revista Nexos.

 

Al cumplirse 20 años del magnicidio de Luis Donaldo Colosio Murrieta, el periodista se aventuró a escribir que si no lo hubieran matado, muy probablemente hubiera ganado la elección presidencial de 1994 con una gran ventaja sobre sus adversarios y hubiera llegado al poder en condiciones muchos menos críticas de las que provocó su homicidio.

 

Refirió que elasesinato del político sonorense desató una corrida de dinero de las reservas públicas de Méxicopor cerca de 14 mil millones de pesos, es decir que tuvo una consecuencia muy severa en el equilibrio de las finanzas públicas.

 

En declaraciones a Radio Fórmula, Aguilar Camín reconoció que “si no lo hubieran asesinado probablemente hubiéramos tenido un desequilibrio en las finanzas públicas que ya se venía arrastrando, pero hubiera sido una crisis mucho menos grave que la de 1995, tanto en sus efectos financieros como en los políticos”.

 

La crisis del 1995, rememoró el escritor, provocó un conflicto político en la cúpula entre el presidente saliente y el  entrante que llenó el país de una inolvidable “calavera” con la que se imputó a Raúl Salinas de Gortari el asesinato del entonces líder priista José Francisco Ruiz Massieu.

 

El novelista hace cuenta que la crisis política y la devaluación fueron graves para el país porque desacreditó por completo un proyecto de modernización y a los tecnócratas que lo habían impulsado.

 

Aguilar Camín dijo que Colosio era un político extraordinario porque la forma en cómo jugo las reglas de la sucesión priista de entonces y se echó a la bolsa al entonces Presidente, porque fue una tarea de seducción absoluta.

 

Consideró que los políticos sonorenses son de una afabilidad extraordinaria, camaradería y cordialidad, pero de lo que ocurre al interior de ellos, solo ellos saben lo que está pasando, y en el caso de Colosio, dijo Aguilar, era reservado hasta con su mujer incluso en momentos de debilidad política.

 

Dijo que la caricatura que lo pinta como un hombre débil es solo eso, una caricatura, ya que en el momento de enfrentar momentos difíciles hasta en lo personal no solo se sobrepone a ellos, sino que no los muestra en donde no tiene que hacerlo.