El escritor y periodista mexicano Andrés Pascoe presentó en Chile su primera novela “psicotrónica”, titulada “Todo es rojo”, donde da cuenta de las divisiones que persisten en la sociedad chilena.

 

Pascoe, que está radicado en Santiago desde hace varios años, señaló en entrevista que en su libro queda de manifiesto “el apocalipsis en una sociedad cerrada, pequeña, muy segmentada, muy marcada por la propia destrucción del Estado”.

 

“Esta es una sociedad que de alguna forma vivió su propio apocalipsis con el golpe de Estado de 1973, con el desmantelamiento de lo que existía y la reconstrucción a partir de un nuevo concepto social basado en la marginación y la segregación”, indicó.

 

Estos elementos se encuentran presentes en “Todo es rojo”, novela que tiene como personajes centrales a un mexicano, un chileno y una argentina que escapan de la violencia apocalíptica que se vive en Santiago hacia la sureña isla de Chiloé.

 

“Yo quería explorar qué sucede si tres personas de distintas nacionalidades, y de visiones políticamente distintas, se ven obligadas a ponerse de acuerdo, bajo cualquier circunstancia, para sobrevivir a una amenaza inminente y absoluta sobre ellos”, dijo.

 

Pascoe añadió que “la metáfora zombi te permite hacer una serie de reflexiones interesantes respecto de la forma en que reaccionan los sectores sociales ante el desorden, como las heridas que parecen relativamente saldadas en realidad siguen ahí”.

 

“He descubierto en mi experiencia chilena, y viviendo en un contexto de muchos extranjeros y latinoamericanos, que somos mucho más diferentes de lo que solemos pensar que somos. Las cosas que nos separan son muy profundas”, aseguró.

 

Estas diferencias, explicó, “tienen mucho que ver con los patrioterismos nacionales, con los resentimientos históricos y también porque las historias que nos han contado sobre los demás son profundamente diferentes. Somos países muy xenófobos”.

 

Detalló que la novela, que será editada a mediados de este año en México, tiene como personajes centrales a “una argentina, que es apolítica, anarquista incluso; un mexicano, que es de izquierda trotskista, y un chileno que es pinochetista”.

 

“Por azares del destino, ellos acaban juntos y se construyen lealtades alternativas, al tiempo que se mantienen vivas estas tensiones políticas ideológicas entre ellos”, precisó el escritor y periodista.

 

Agregó que, “al mismo tiempo, conforme la sociedad se va desarmando, resurgen esos odios sociales porque los sobrevivientes de clase alta conciben que está viniendo el lumpen proletario por ellos”.

 

Enfatizó que “ésta no es una novela pretenciosa, es un cuento de sexo, violencia y destrucción y tiene muchos subtextos. Lo que intenté lograr era algo que fuera divertido e interesante para todo el mundo”, dijo.

 

“La idea es que la pueda leer un adolescente, porque es una historia rápida y ágil, con mucha tensión y energía contenida, y también un lector más complejo, porque puede encontrar elementos que espero le resulten una lectura interesante, sobre lo que es la sociedad”, añadió.

 

Pascoe, que se desempeña en Chile como corresponsal, apuntó que “‘Todo es rojo’ nace porque a los ocho años vi una película de zombis, ‘El regreso de los muertos vivientes’, y me dejó completamente marcado, me pareció una fantasía aterradora y genial”.

 

“Me pareció que esta fantasía de estar rodeado por esta amenaza absoluta y no pensante era sumamente atractiva y con los años me convertí en experto en cine zombi, en cine psicotrónico (que aborda la psicotrónica o conjunto de técnicas utilizadas en la parapsicología para interpretar algunos fenómenos paranormales), viendo todas las películas que podía”, comentó.

 

El ex columnista del diario mexicano “La Crónica de Hoy” agregó que “Chile es un país excepcionalmente bueno para una crónica apocalíptica, por su carácter isleño, insular, con fronteras naturales casi infranqueables, por el temperamento chileno”.