A partir de julio Aeroméxico operará siete vuelos semanales hacia y desde Asia, promoviendo las relaciones bilaterales de México con Japón y China, los cuales serán operados por el nuevo Boeing 787 Dreamliner, que se incorporó a la ruta en octubre de 2013.
Con ello ofrecerá semanalmente cerca de 3,500 asientos hacia Tokio y Shangai.
En un comunicado informó que a partir de abril sumará su cuarta frecuencia semanal hacia y desde Tokio, mientras que en julio agrega su tercer vuelo a la semana hacia y desde Shanghai.
En el caso de los vuelos hacia y desde Tokio serán operados por el nuevo Boeing 787 Dreamliner, que se incorporó a la ruta en octubre de 2013.
Por su parte, el mercado chino podrá continuar viajando a bordo de los aviones Boeing 777, que cuentan con 277 asientos, 49 de ellos en cabina Premier, servicio de entretenimiento individual, además de alimentos y bebidas en cortesía.
Con ello, ofrece a los viajeros tanto mexicanos como latinoamericanos la posibilidad de conectar vía terrestre, marítima o aérea a destinos como Hiroshima, Nagasaki, Nara, Kyoto, Tokyo, en Japón; además de Shanghai, Beijing, Cantón, en China.