A las 18:02 horas poco antes de iniciar el proceso de pena de muerte Ramiro Hernández Llanas, en el estado de Texas, familiares del mexicano acudieron a la prisión de Huntsville para presenciar la ejecución.
A su arribo también acudió un párroco.
Durante la mañana de este miércoles sostuvo un largo encuentro de cuatro horas con sus familiares entre los que se encotraba su madre y algunos de sus hermanos.
El Diario local el El Mañana informó que el desayuno del sentenciado fue atún, chocolate y soda.
Ramiro Hernández Llanas, de 44 años, fue sentenciado a la pena capital por el homicidio del ranchero y profesor universitario, Glen Lich, el 14 de octubre de 1997.