En los diferentes establecimientos en México es donde los clientes pagan anticipadamente un café o alimento a personas en situación de calle o que no tienen recursos.”Descubrí la iniciativa en un cuento que se volvió viral sobre cómo pasa esto en Italia, lo platiqué con unos amigos, pero no pasó nada. En septiembre vuelvo a ver la publicación y me pongo a investigar, vi que en México había una página en Facebook que nadie había movido, mientras que en Argentina tenía 40 mil likes, así que me puse a trabajar”, explicó a VIDA+ la fundadora de la campaña, Fabiola Kun.
El cuento escrito por el italiano Luciano de Crescenzo tiene lugar en el Nápoles del siglo XVII, en el barrio obrero de Sanita donde anidaba la pobreza.
En ese poblado, cuando alguien estaba feliz después de que algo bueno hubiese pasado, en lugar de pagar un café, pagaba dos, el suyo y el del siguiente, dejando sobre la mesa el dinero para un indigente o un vagabundo. “Era como la compra de un café a la humanidad”, se lee en la descripción de Crescenzo.