MADRID. En una nueva declaración a la Audiencia Nacional, el hoy caído en desgracia, Luis Bárcenas confesó que “En todas las provincias y regiones se llevaba una caja B para las elecciones”; las palabras de Bárcenas complementan la línea de la declaración-confesión que prestó en julio del año pasado, pocos días después de ingresar en prisión.

 

Según el extesorero, no tenían problemas de recaudación porque en época de elecciones los potenciales donantes “se desvivían” por dar dinero al partido. Entre las campañas sufragadas con “dinero negro” estaría la de Rajoy en 2004, a cuyos gastos iban destinados los 200 mil euros (3.6 millones de pesos)  que en la contabilidad opaca aparecen entregados por el presidente de las Cortes Valencianas, Juan Cotino.

 

Respecto a quién conocía el funcionamiento de la caja B del partido que él mismo administraba, Bárcenas aseguró que “los secretarios generales la revisaban y los presidentes lo sabían”. De Rajoy, ha reiterado que le entregó 25 mil euros (450 mil pesos) en mano y que sus trajes se pagaron con dinero negro. Llegó a tener las facturas pero las acabó destruyendo.

 

El extesorero del PP ha ratificado sus declaraciones anteriores, añadiendo algún detalle en ciertos episodios. Por ejemplo, precisó que el primer movimiento de la operación para financiar al PP de Castilla-La Mancha lo dio el ex alcalde de Toledo y ex senador José Manuel Molina. Según Bárcenas, fue él quien le explicó que el PP regional necesitaba financiación y que hablara del asunto con María Dolores de Cospedal.

 

Niega que su dinero fuera de la caja B

 

Durante la primera parte de su declaración, Bárcenas negó que se llevara dinero de la contabilidad B del PP a sus cuentas suizas. Según aseguró ante el juez, los ingresos en el paraíso fiscal provenían de aportaciones de empresarios argentinos o uruguayos que le confiaban su dinero para que lo administrara a cambio de comisiones.

 

Según fuentes de la acusación, el extesorero ha insistido en su afirmación de la declaración anterior de que Francisco Álvarez Cascos estaba perfectamente al tanto de la contabilidad B del partido. De hecho, en los llamados papeles de Bárcenas aparecen varios ingresos de dinero que le entregó personalmente el exsecretario general del PP, que ejerció de manera efectiva durante tres años como tesorero.

 

Como en su declaración-confesión de julio, Bárcenas ha insistido en que heredó de Rosendo Naseiro la caja B del PP que él manejó hasta que el caso Gürtle le apartó de la tesorería. Fue el propio Naseiro, dice Bárcenas, quien le dio las llaves de la caja fuerte en la que se guardaba el dinero B.

 

El juez Pablo Ruz interrogó ayer al extesorero del PP en presencia de dos fiscales, siete acusadores y 17 defensas.