El líder transportista y ex diputado del PRI, José Trinidad Martínez Pasalagua, volvió ayer a Michoacán tras haber permanecido casi cuatro días en la SEIDO, luego que la Procuraduría General de la República (PGR) no encontró elementos para proceder en su contra, aunque sigue oficialmente bajo investigación por nexos con Los Caballeros Templarios.

 

“No se valoró si es inocente o culpable. El señor se fue porque no había un elemento para proceder en su contra, pero con la advertencia de que deberá estar localizable todo el tiempo, y que si pretendiera salir del país, tendrá que avisar y justificarlo”, dijo ayer a 24 HORAS un funcionario federal.

 

De acuerdo con las fuentes consultadas por este diario, el Ministerio Público Federal si tenía la intención de ir contra de Martínez, al menos con un arraigo, pero no se reunió la evidencia suficiente para presentarla ante un juez.

 

A diferencia del ex secretario de Gobierno, Jesús Reyna, que un día después de su detención fue arraigado, la SEIDO duplicó el plazo inicial de 48 horas que tenía para definir la situación de Martínez Pasalagua, detenido la tarde del martes pasado, en un intento por reunir pruebas.

 

Sin embargo, más allá de algunas declaraciones de personas que lo acusan de colaborar con los delincuentes, y pruebas documentales sobre algún encuentro con el crimen organizado, no se encontró otro elemento para sustentar por ahora actividades criminales.

 

El Código Federal de Procedimientos Penales contempla que para que una persona pueda ser sometido por lo menos a un arraigo domiciliario, deben existir indicios de la comisión de un delito grave que justifique la medida cautelar.

 

“No se solicitó el arraigo de Martínez Pasalagua, sin embargo, puede ser llamado a comparecer nuevamente, toda vez que la investigación continúa abierta”, subrayó la PGR ayer en un comunicado.

 

Los indicios que continúa rastreando la Procuraduría buscan corroborar si el líder transportista otorgó algún apoyo material, logístico, económico o de cualquier otra índole para fomentar las actividades de tráfico de drogas y otras ilícitas de los Templarios en el Estado, aprovechando su posición económica o las influencias con las que pudiera contar.

 

Personal de inteligencia de la agencia de Investigación Criminal de la PGR, de la Policía FEDERAL y el CISEN trabajan en este caso.

 

Sí, pero obligado

 

De acuerdo con las fuentes consultadas Martínez Pasalagua reconoció en su declaración que en el 2011, en una fecha que “no recuerda bien, pero que fue a finales de año”, fue llevado bajo amenazas a una reunión con supuestos delincuentes.

 

Dijo que no reconoció a Servando Martínez, La Tuta, o a algún otro líder templario. Sobre si Reyan estaba ahí, comentó que le parecía que si aunque como estuvo casi todo el tiempo viendo hacia el suelo y “con miedo”, no lo recordaba bien o a otros participantes.

 

Existen algunos documentos, indicaron en PGR, que respaldan solamente la participación del líder transportista en alguna reunión pero no más allá. Extraoficialmente se ha mencionado sobre un video y fotografías de estas reuniones.

 

Por otro lado el ex secretario de Gobierno Jesús Reyna cumple hoy los primeros 9 días de los 40 que un juez concedió de arraigo en su contra. Su situación se estará definiendo en mayo.

 

Detención arbritraria

 

Luego de que se le otorgara la libertad al líder transportista José Trinidad Martínez Pasalagua, su defensa afirmó que ello comprueba que se trató de una “detención arbitraria”.

 

“Quedó libre y está en la ciudad de Morelia. No hubo elementos para que un momento determinado se le pudiera consignar”, dijo a 24 HORAS Eduardo Quintero Madrigal, abogado de Martínez Pasalagua.

 

Aunque autoridades de la PGR confirmaron que no había orden de arraigo en contra del también líder sindical, su defensor dijo que “la petición de arraigo fue negada”.

 

“Creo que en esta ocasión la Procuraduría actuó correctamente, y entonces estamos hablando que efectivamente se trató de una detención arbitraria”, señaló el defensor, quien reiteró que su cliente era investigado por delincuencia organizada.

 

Por otra parte, funcionarios locales e integrantes de autodefensas consultados por este diario prefirieron no dar su opinión respecto a la liberación de líder transportista al considerarlo un “hombre peligroso” quien pudiera tomar represalias en caso de que se sienta atacado con alguna declaración.

 

“A nosotros no nos corresponde investigar eso, son las autoridades quien deben indagar bien a todos los involucrados con ellos (los Templarios)”, dijo Alberto Gutiérrez, líder comunitario en Parácuaro.