RÍO DE JANEIRO. La huelga de la Policía Militar en Salvador de Bahía, una de las ciudades más peligrosas de Brasil y sede mundialista, dejó 21 muertos, mientras algunos comercios, escuelas y universidades cerraron hoy sus puertas ante la ola de inseguridad.

 

La Policía Militar de Bahía anunció la noche del martes el inicio de una huelga indefinida por su rechazo a un proyecto gubernamental que prevé la reforma de las condiciones de trabajo de estas fuerzas de seguridad.

 

En apenas 24 horas, al menos 21 personas murieron en la ciudad, mientras escuelas, rutas de transporte público y comercios en la Avenida Siete de Septiembre –donde se concentra buena parte del comercio- fueron cerradas tras registrarse saqueos el miércoles.

 

La presidenta brasileña Dilma Rousseff anunció este jueves que autorizó el envío de tropas militares a la ciudad para garantizar la seguridad, en tanto las autoridades federales negocian con los huelguistas el fin del paro.

 

El clima de inseguridad puso en peligro incluso la celebración de un partido de fútbol esta noche en el Arena Fonte Nova, estadio que albergará varios partidos de la Copa del Mundo, el primero de ellos el España-Holanda el 13 de junio.