Itatí Cantoral siempre ha sido muy polémica, porque tiene carácter y no se deja, da su opinión y se defiende, pero desde que se casó y tuvo hijos, ha estado más tranquila.

 

De hecho, Itatí se ha dedicado a trabajar, pero está muy triste, pues le han hecho fama de borrachita y eso la está perjudicando, dice que ésta vez, le está afectando, pues cree que es una campaña de desprestigio en su contra, ya que lleva más de 3 años.

 

Al principio no hizo caso de los comentarios, pero ahora, lo que se escribe de ella es demasiado, y sus hijos le cuestionan su comportamiento, pues los molestan en las escuela, haciendo referencia a las notas que han sido publicadas en revistas.

 

Ahí habría que analizar por qué se le ha hecho esa mala imagen. Suele suceder que por una o dos veces que las descubren en estado inconveniente, esa idea perdura a lo largo del tiempo. Creo que nadie inventa nada más porque sí, una historia. Es cierto que un acontecimiento se deforma, se magnifica y se distorsiona de muchas maneras, pero en el caso de Itatí hay videos donde se ve que tomó copitas de más; como cuando habló de otras famosas, mientras esperaba su coche y luego hasta pidió perdón a Lucía Méndez.

 

No se trata de juzgarla, ni recriminarla, pero a veces se les olvida que son artistas. Es un hecho, que todos tienen derecho a divertirse y a tomar, si así lo deciden, pero si es en lugares públicos, hay que tener precaución, para no ser vistos, porque acuérdense que una vez que se hacen mala fama, es difícil borrarla.

 

Y siempre es más fácil echarle la culpa a los demás, que aceptar nuestros errores, en este caso un porcentaje es responsabilidad de Itatí Cantoral y otro tanto de los medios. Me refiero a las notas que hablan de que le gusta beber, sus asuntos personales y con su marido, los desconozco.

 

El caso es que si ahora no toma, qué bueno y ojalá no repercuta en su trabajo, pues Itatí asegura que el daño ha sido como mujer, como madre y profesionista.

 

Hay más….pero hasta ahí les cuento.