La reconstruida casa de los abuelos maternos del nobel colombiano Gabriel García Márquez, convertida en Casa Museo, es hoy un lugar de visita de los amantes de su obra y punto turístico por excelencia de Aracataca, su pueblo natal y cuna del mítico Macondo.
La casa, de una planta, tiene hoy catorce ambientes, a través de los cuales el visitante puede recrear los primeros años de vida del escritor en el mismo lugar que inspiró su obra en la tórrida Aracataca.
La reconstrucción
La vivienda original, construida a comienzos del siglo pasado en madera, fue demolida hace 44 años y en su lugar se levantó otra que desfiguró su estilo caribeño, pero en 2006 el Ministerio de Cultura inició una amplia reforma para devolverle el estado que tenía en 1927, cuando nació Gabriel García Márquez.
En la reconstrucción participó el propio Gabo, que hizo varias observaciones al proyecto y aprobó los nombres de cada ambiente, todo con el propósito de rescatar el contexto de la vida cotidiana del escritor.
En este recinto reconstruido con detalle luego de décadas de abandono es posible encontrar la habitación oficina donde el coronel Nicolás Márquez, padre de Luisa Santiaga Márquez Iguarán y abuelo de Gabo, se ocupaba de los negocios.