El presidente, Enrique Peña Nieto, aseguró que su administración busca un desarrollo armónico del país, y consideró, las reformas estructurales son el vehículo para detonar el crecimiento económico.
En Mazatlán, Sinaloa, donde puso en marcha la planta tratadora de aguas El Crestón, el mandatario consideró que los cambios constitucionales, impulsados por su gobierno en materia energética, fiscal, de telecomunicaciones, transparencia y electoral, traerán progreso a la ciudanía.
“Es cierto que las reformas impulsadas el año pasado y que hoy se están trabajando en lo que es su legislación secundaria son detonantes de crecimiento económico, de mayor desarrollo económico y progreso para toda la nación y esto es algo que estaremos testimoniando en el tiempo”, dijo en Mazatlán.
El gobierno federal, manifestó, busca que el desarrollo económico y social “no sea privilegio de unos cuantos ni de unas cuantas regiones del país”, por lo cual, prometió, seguir “recorriendo como lo hemos hecho aquí en el ánimo de encontrar la representación de la sociedad mexicana, de dar a conocer lo que el gobierno de la República se está haciendo en todas las zonas del país”.
Durante la inauguración de forma remota de la planta de tratamiento Culiacán Sur, Peña Nieto pidió a la población cuidar el agua, en especial, los recursos hídricos y se pronunció porque las entidades implementen programas para tratar las aguas residuales.
Para asegurar la sustentabilidad hídrica del país, el presidente instruyó al titular de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), David Korenfeld, para realizar una revisión de las plantas tratadoras en las 32 entidades del país y asegurar su operación.
David Korenfeld Federman, titular de la Conagua, manifestó que, con las dos plantas de tratamientos inauguradas en Sinaloa, la entidad se coloca como una de las primeras en tratar el 100 por ciento de sus aguas residuales.