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Gráfico: Allan Ramírez

 

La falta de modernización en la infraestructura de las tecnologías para la información y las comunicaciones en México, así como las deficiencias en su sistema educativo impiden que el país pueda converger digitalmente con las tecnologías avanzadas.

 

Ayer el Foro Económico Mundial (WEF por sus siglas en inglés), publicó su índice de Conectividad Global, en el que México descendió, en comparación con el año pasado, 16 posiciones, debido principalmente a la escasa penetración de las TIC en la población y a una baja capacidad de innovación por parte de sus empresas:

 

“Además, su ecosistema de innovación necesita fortalecerse y, en general, las empresas mexicanas tienen una baja capacidad de innovación, lo que resulta en impactos económicos bajos y una población que se concentra en actividades de baja productividad y en pocos considerados como intensivos en conocimiento”, explica el documento.

 

El informe muestra cómo a pesar del avance presentado en los últimos dos años, los esfuerzos de México no alcanzaron a consolidar “los logros del pasado”, lo que lo dejó en el lugar 79 de un ranking que incluye 148 economías, tanto de primer mundo, como de países emergentes.

 

“Así que, México no logra converger digitalmente con economías más avanzadas”.

 

Los costos

 

El costo de la infraestructura en México en comparación con otras 78 economías a nivel global, es muy alta, lo que dificulta la interacción y aprovechamiento de los ciudadanos.

 

“El costo de acceder a la infraestructura existente permanece alto y la calidad de su sistema educativo sigue conformándose como un reto para proveer al país con las habilidades necesarias para una economía más digital y cambiante”, dice el WEF.

 

El ranking, que revela las condiciones de los países medidos hasta diciembre del 2013, expone la calidad de la educación en México dentro de un nivel de 3.0 en una escala donde 1 es “peor” y 7 es “mejor”.

 

Mientras que la educación, relativa a matemáticas y ciencia, está por debajo de este promedio, colocándose en un 2.7 dentro de la escala del ranking.

 

“Todo esto resulta en bajos niveles de uso de las TIC por parte tanto de los individuos y las empresas, a pesar de los importantes esfuerzos del gobierno por ofrecer muchos de sus servicios en línea, lo que permite buenas tasas de participación ciudadana”.

 

De acuerdo con el estudio, las condiciones de México no provienen de una tendencia regional, debido a que países como Chile, Panamá, Costa Rica y Uruguay tienen “relativamente” buenos resultados, aunque con algunas debilidades en sus sistemas globales de innovación.

 

“Por otro lado, se registra poco progreso en países como Brasil, México, Argentina, Bolivia y Venezuela”, detalla el informe anual.

 

Finalmente, el WEF afirma que la completa implementación de la Agenda Digital podría ayudar a México a rebasar los problemas que sus individuos y por lo tanto sus empresas tienen, en cuanto al uso y aprovechamiento de las tecnologías de la información y la comunicación.

 

DATO

 

México pasó del lugar 63 al sitio 79, de un total de 148 países considerados