¡Qué bonito! Qué bonito concierto de rebuznos están ofreciendo algunos legisladores, varios funcionarios públicos y los dirigentes de los partidos políticos que participan en el análisis y discusión de las leyes reglamentarias -también conocidas como secundarias- de la reforma de telecomunicaciones.
El martes, por cierto, ocurrió un hecho insólito en plena sesión de la Cámara de Senadores donde se lleva a cabo el susodicho concierto: Se presentó una “chiva loca” (Luisito Villarreal dixit) que empezó a desentonar con sus balidos, por lo que sus mismos compañeros lo agarraron a varazos, al tiempo que le decían cosas feas, muy feas hasta que lo obligaron a que tirara para el monte. ¡Esos ignorantes panistas, perredistas y todos los que me critican no saben reconocer la “calidad de la melcocha”! ¡Yo soy un artista consumado que ha dado conciertos de rebuznos, perdón, de piano, ante reyes, príncipes y grandes personajes del mundo de la política! ¡Ah, y también soy poeta, como el “doctor Longines”!, pareció decir el senador Javier Lozano. Pues sí, “manito”, pero en el tema de las telecomunicaciones has demostrado que puede más tu soberbia, tus intereses personales y los compromisos con tu antiguo partido que el interés de la sociedad a la que supuestamente representas en el Senado, le reclaman los blanquiazules, los perredistas y aquellos priistas que siempre lo han despreciado, y más cuando “cambió de bando”, en el buen sentido de la palabra, mejor dicho, en el sentido político.
Pero volviendo al concierto de rebuznos que ofrecen funcionarios, algunos legisladores “purificados”, dirigentes de partidos políticos y otros miembros de la clase política nacional, los observadores políticos objetivos e imparciales apuntan que a estas alturas es casi imposible saber dónde quedó la bolita, porque todos los involucrados -que son muchos- hablan del asunto con circunloquios, verdades a medias o mentiras abiertas, lo que hace suponer, sin temor a equivocarse, que la mencionada legislación es una especie de iceberg del que es visible apenas 10%, mientras que el 90% restante permanece oculto bajo las aguas de ese encrespado mar formado por los intereses creados… unos intereses más o menos legítimos, otros no tanto y la mayor parte de ellos francamente inconfesables.
Menuda tarea dejaron los políticos a sus comunicadores oficiales y oficiosos (“paleros”, pues), que se han visto en la necesidad de enderezar las múltiples declaraciones de sus jefes al son de la clásica frase: “Lo que quiso decir”.
Una cosa es cierta en este enredo: las leyes secundarias de la reforma en materia de telecomunicaciones son papas ardiendo que ya despellejaron a diputados, senadores, dirigentes de partidos, secretarios de Estado, “expertos” en el tema, analistas bisoños y de los otros, y un montón de espontáneos que se sintieron muy sabrosos y que ya no saben en dónde esconder el rabo. ¡Pues entre las patas!, aconsejan observadores bien intencionados.
El multicitado concierto, que tuvo que suspenderse por la participación de la “chiva loca”, se reanudará hoy viernes en la Cámara de Senadores. Dicen los malosos que en la sesión podría presentarse el engendro que nació hace unos días del cruce de una cebra con un asno, cebrasno, pues, que tiene patas de cebra y el cuerpo de burro. ¿Quién o quiénes lo representarán?
AGENDA PREVIA
El líder de la bancada del PRI en San Lázaro, Manlio Fabio Beltrones, aseguró que los acuerdos alcanzados en torno a las leyes secundarias en materia político-electoral permitirán que una vez aprobado el dictamen en el Senado de la República, transite favorablemente en la Cámara de Diputados. Aunque advirtió que “parece harto difícil” que se apruebe antes del 30 de abril. Pero no pasa nada si se desahoga en los primeros días de mayo, señaló. Bueno, mientras no se les atore varias semanas, todo está bien.