Rodolfo Tuirán Gutiérrez, subsecretario de Educación Media Superior de la Secretaría de Educación Pública (SEP), descartó que el llamado “bono demográfico“, que comprende a personas en edad de estudiar o de ser económicamente activas, se cobre “de facto”, pues se requiere de un conjunto de tareas para capacitar adecuadamente a los empleados.
“Si no, la oportunidad que representa el bono puede convertirse, más bien, en un problema mayor, en una pesadilla, en muchos sentidos, y la tarea que tenemos que hacer, básicamente está en tres o cuatro renglones, y una crucial, es la que tiene que ver con la formación y el desarrollo de habilidades y competencias de los jóvenes”, aseveró el funcionario federal durante su intervención en el Foro Internacional “TrasFormación, habilidades para la productividad”.
Además, aseguró que ante la falta de mano de obra calificada para cubrir vacantes en empresas, la SEP impulsa estrategias para cerrar la brecha entre los planes y programas de estudio en los niveles educativos y los requerimientos del sector productivo.
Tuirán Gutiérrez también mencionó que se fortalecen acciones contra el abandono, la exclusión y el fracaso escolar; “estamos revisando y actualizando el perfil de egreso”, a fin de elevar la pertinencia de dicho nivel educativo.
Con ese propósito se ha integrado un grupo de expertos cuyas recomendaciones contribuirán al fortalecimiento del currículo educativo, la adición de competencias clave en el perfil de egreso, la formulación de parámetros y estándares, así como el establecimiento de instrumentos para evaluar el nivel de dominio de las competencias.
Ante representantes del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que organizó el seminario con la SEP, Tuirán explicó que como parte de esta estrategia, la autoridad educativa se ha propuesto fortalecer el componente de habilidades socioemocionales en la formación de los jóvenes.
Dichas habilidades, entre las que destacan la autorregulación, la determinación y la relación con uno mismo, entre otros, se pueden moldear entre los adolescentes, mencionó el servidor público.
Además de la inclusión de algunas habilidades socioemocionales en el Marco Curricular Común de la educación media superior, “operamos el programa Construye T con un nuevo diseño y avanzamos en la capacitación de docentes y directores para apoyar este propósito”, precisó.
Otra estrategia involucra al Fideicomiso de los Sistemas Normalizados de Competencia Laboral y de Certificación de Competencia Laboral —el CONOCER— con el cual se busca avanzar en la consolidación de mecanismos de vinculación entre el mundo educativo y el laboral.
Lo anterior incluye la revisión de la oferta educativa, la actualización de planes y programas y la certificación de competencias.
El funcionario federal especificó que junto con el CONOCER y las autoridades educativas estatales, “nos proponemos fortalecer las capacidades institucionales de planeación y aprovechar la información relevante, con el fin de prever la demanda laboral y el perfil de los trabajadores requeridos por los sectores estratégicos”.
Refirió que la última estrategia impulsa la implantación tanto del modelo de formación dual, como del modelo de formación de emprendedores.
“Buscamos fortalecer el componente de competencias profesionales de los programas educativos, con un más logrado equilibrio entre la formación teórica y la formación práctica; y aumentar la empleabilidad de los jóvenes”, destacó.
Añadió que con el modelo de emprendedores, la SEP se propone ampliar las opciones de los jóvenes.
“Todas estas estrategias están dirigidas a construir un sistema de formación de habilidades más coordinado, más efectivo y más incluyente; un sistema de formación indispensable para empoderar a los ciudadanos, para propulsar la productividad y la competitividad nacionales y para impulsar el desarrollo que el país demanda”, agregó.