El secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, y de Hacienda, Luis Videgaray, aprovecharon la presentación del paquete de leyes secundarias en materia de hidrocarburos, para responder a dos de las 10 preguntas que hizo el cineasta y ganador del Oscar, Alfonso Cuarón, sobre los eventuales beneficios de la reforma energética.
Ambos funcionarios precisaron que las respuestas completas a las 10 preguntas de Alfonso Cuarón, así como el texto íntegro de las leyes secundarias enviadas al Senado, estarán disponibles “esta misma tarde” en la página de internet presidencia.gob.mx/reformaenergetica/.
“¿Cuándo bajarán los precios del gas, gasolina, combustóleo y energía eléctrica? ¿Qué otros beneficios tangibles se esperan de la reforma? ¿Cuál es el cronograma de estos beneficios?”, fue el primer cuestionamiento del cineasta al presidente Enrique Peña Nieto.
“A mediano plazo”, respondió Joaquín Coldwell, quien argumentó que en 2013 México importó 30% del gas natural que se consumió en el país, lo cual cambiará, dijo, con la reforma energética propuesta por el Ejecutivo.
“Pemex no estaba produciendo todo el gas natural que el país necesita, por las limitaciones que imponía el modelo regulatorio” el cual, dijo el secretario de Energía, se propone cambiar mediante las leyes secundarias que ya fueron enviadas al Senado esta mañana.
A decir del funcionario federal, el costo de la electricidad bajará si se reduce la importación de gas natural, y para ello es necesario desarrollar una amplia red de gasoductos en el país, así como aumentar la producción de gas natural para así sustituir al combustóleo o el diésel, que son más caros.
“El costo de la electricidad dependen del combustible que se utiliza para generarla. El gas natural es más barato que el combustóleo y el diésel. Y el gas natural es más amigable con el medio ambiente”, dijo Joaquín Coldwell.
El costo de la electricidad también bajará, detalló, porque habrá empresas privadas que por sí solas o en asociación con Pemex, producirán más gas natural. “Habrá múltiples productores de gas compitiendo entre sí”, prometió.
“Entre más gas natural se produzca en México, menor será el costo de generar electricidad y reducirán las tarifas del recibo de luz”, asentó.
Asimismo adelantó que durante el sexenio de Peña Nieto se construirán 10 mil kilómetros de nuevos gasoductos que permitirán tener una amplia red para transportar el gas y tenerlo a precios competitivos.
Por su parte el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, respondió la pregunta 10 que hizo Alfonso Cuarón en días pasados.
“Dos experiencias desastrosas permanecen en la memoria de los mexicanos: la quiebra de 1982 (luego del dispendio, la ineptitud y la corrupción que caracterizó el manejo de la riqueza petrolera en los años setenta) y las reformas discrecionales y opacas de tiempos de Salinas de Gortari, buenas para las manos privadas, pero dudosas para los consumidores. ¿Qué nos garantiza que esas experiencias, que han ahondado los abismos sociales, no se repitan? Usted y su partido cargan con la responsabilidad histórica de estas reformas. ¿Cree realmente que el Estado mexicano tiene los instrumentos para llevarlas a cabo con eficacia, sentido social y transparencia?”, fue el cuestionamiento del director de Gravedad.
A esto, Videgaray Caso señaló que se debe recordar que entre las causas que propiciaron dichas crisis, está el modelo de desarrollo petrolero basado en el endeudamiento público, por lo cual prometió que con la propuesta de Peña Nieto no ocurrirá lo mismo pues no recurrirá a ese método.
“Pemex busca impulsar el desarrollo del sector sin recurrir a un endeudamiento público, por ello se propone que los contratos sean compartidos con empresas privadas” para aumentar la productividad.
En el 1982 el modelo energético “era estatista y monolítico, sin control ciudadano”. Lo que se propone en la actual reforma energética, agregó Videgaray Caso, “es todo lo contrario: establecer sistema abierto, con competencia intensa, transparencia y rendición de cuentas”.
“O abrimos el sector energético a la participación de la sociedad, o nos condenamos a un modelo burocrático y al endeudamiento para desarrollar al sector energético”, finalizó el encargado de las fianzas públicas del Estado mexicano.