CARACAS. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo hoy que el asesinato del concejal de Caracas y ex director de Inteligencia Eliécer Otaiza la semana pasada fue alentado por personas que tuvieron el poder en Venezuela en el pasado y que hoy se encuentran en Miami, Estados Unidos.

 

“El asesinato de Otaiza lo alentaron desde Miami sectores que tuvieron el poder mediático y económico en Venezuela en el pasado. Tenían meses alentando el asesinato de Otaiza y de otros lideres de la revolución”, afirmó Maduro durante el discurso del Primero de Mayo en una céntrica plaza de Caracas.

 

“Lo prepararon para tratar de esconder las intenciones de sus autores intelectuales. No puedo abundar en detalles de la investigación”, indicó el jefe del Ejecutivo.

 

El cuerpo de Otaiza, ex director de la extinta Dirección de Servicios de Inteligencia y Prevención (Disip), ahora Servicio de Inteligencia (Sebin), apareció el sábado pasado sin identificar con cuatro impactos de bala en el municipio capitalino de El Hatillo.

 

El ministro de Interior venezolano, general Miguel Rodríguez Torres, informó el martes de la detención de uno de los presuntos asesinos del que también era concejal así como de la identificación del resto de los supuestos implicados en el caso.

 

Para Maduro, la muerte de Otaiza fue “planificada” ya que, defendió, fue “ejecutado como un falso positivo”, en referencia a como se conocen en Colombia una práctica por la cual agentes del Estado asesinaban a civiles para hacerlos pasar por guerrilleros y obtener beneficios por mostrar resultados en sus operaciones.

 

“Para que fuera presentado ante la opinión pública como un hecho de violencia más”, aseguró Maduro.

 

Indicó que “para completar” la muerte de este ex militar y también diputado constituyente, periodistas de los que solo dijo que eran “tarifados de la derecha, derecha y medios de prensa escrita”, comenzaron hoy “una operación” para tratar de, dijo, “asesinar ahora moralmente” a Otaiza.

 

Varios medios escritos venezolanos publican hoy que los presuntos asesinos del ex director de inteligencia pertenecerían supuestamente a una banda delictiva de entre 10 y 15 personas que actúa por la zona donde fue asaltado Otaiza.

 

“No respetan la dignidad ni de los muertos”, afirmó Maduro, acusándoles de pretender “imponer versiones”.

 

“Pero no saben la voluntad que yo tengo y en el caso de Otaiza se va a saber y vamos a encontrar la verdad verdadera y a los autores intelectuales y a los sicarios”, afirmó.

 

“No habrá policías, no habrá periodistas tarifados que puedan completar la perversa obra de quienes planifican llevar a nuestra sociedad a una guerra civil”, añadió.

 

Venezuela es uno de los países más golpeados por la inseguridad y la violencia que, según datos oficiales, se cobró la vida el año pasado de 11 mil personas, número que las ONG elevan a cerca de 25 mil.