Prince Boateng era un futbolista ghanés amateur que decidió en 1981 buscar suerte en Alemania, se enroló en las filas del modesto Reinickendorfer. No paso mucho con su carrera. Prince no se imaginó que un par de décadas después su apellido sería conocido en todo el país teutón.
En 1987 Prince y Cristina tuvieron a Kevin-Prince su primer hijo, sin embargo solo unos meses después Prince dejó el hogar, huyo con Nina con quien tuvo un año y medio después a Jerome.
Los hermanos crecieron en lugares completamente opuestos, Kevin en Wedding, donde según sus palabras “te haces traficante de drogas o futbolista” mientras que Jerome en el aristocrático Berlin-Wilmersdorf, Alemania.
Kevin se ganó a pulso los apodos con los que se le conocía: K-P, El Chico del Gueto, King Boat y The Big Bang, en contra parte Jerome tranquilo, introvertido e incluso tímido creció sin complicaciones.
El rompimiento
Con comportamientos tan distintos, la distancia se hacía mayor. Un día, tras una noche de borrachera Kevin fue expulsado de la concentración de la selección alemana Sub-21, el comportamiento errático lo dejó sin selección. Pero entonces, aprovechando su otra nacionalidad y avalado por la FIFA, optó por integrar el seleccionado de Ghana.
En 2007, gracias a su juego deslumbrante fue fichado por el Tottenham Hotspur de Inglaterra, se fue prometiendo no volver a pisar nunca más suelo alemán.
Tres años después la delgada liga que unía a los hermanos Boateng se rompió. En un juego de la Copa FA entre el Tottenham y Chelsea, Kevin le destrozó los ligamentos del tobillo derecho a Michael Ballack, en ese entonces capitán indiscutible de la selección Alemana.
Ballack se quedó sin Mundial, las posibilidades de la selección Alemana se vieron minadas. Jerome y toda Alemania profirieron duras críticas contra Kevin, con el escándalo mediático en su punto más alto el mayor de los Boateng dejó en claro las cosas: “Cada uno tiene su familia. Yo, la mía, y él, la de él. No tenemos relación”.
El balón los reúne
El destino los puso frente a frente el 23 de junio de 2010 El Soocer City de Johannesburgo fue testigo de un hito en la historia del futbol, dos hermanos en selecciones distintas se enfrentaban. Kevin como estrella de Ghana y Jerome defendiendo los colores de la Mannschaft.
Cuatro años después, la suerte los vuelve a enfrentar, el próximo 21 de junio en el estadio Castelao de Fortaleza, Alemania y Ghana jugarán su segundo partido de Brasil 2014, y ahí por segundo Mundial consecutivo los dos hermanos Boateng se verán las caras.