Los proyectos de movilidad y conectividad serán una prioridad para elevar la calidad de vida y aumentar la productividad del centro del país, la región más urbanizada y con mayor densidad de población del país.
De los 109 proyectos estratégicos que el gobierno federal tiene previstos para impulsar el desarrollo en los 14 estados que conforman la región centro del país (Aguascalientes, Colima, Distrito Federal, Guanajuato, Hidalgo, Jalisco, México, Michoacán, Morelos, Nayarit, Querétaro, San Luis Potosí, Tlaxcala y Zacatecas) 48 están enfocados al transporte y la infraestructura vial.
De acuerdo con el Programa Regional de Desarrollo del Centro 2014-2018, publicado hace unos días en el Diario Oficial de la Federación (DOF), la fortaleza del centro del país está en ser una región nodal por excelencia, ya que es el enlace entre la zona norte del país, desarrollada y de gran pujanza económica, y una amplia zona de rezagos como es el sur-sureste, además de ser enlace en el intercambio comercial entre los océanos Pacífico y Atlántico.
Ante este escenario, la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) elaboró un diagnóstico y análisis de la vocación regional y los retos que enfrentan las 14 entidades federativas que integran la zona, a fin de realizar diversos proyectos en coordinación con estados y municipios.
De estas obras, la mayoría se enfocan a la construcción y modernización de carreteras, libramientos y distribuidores viales; además de obras como el tren interurbano México-Toluca, el tren rápido Querétaro-Ciudad de México y la construcción de una terminal portuaria de pasajeros en Puerto Vallarta.
Dichos proyectos forman parte de los cinco objetivos centrales que la Sedatu planteó para impulsar el desarrollo de la región: crear programas que eleven la productividad, fortalecer el bienestar y las capacidades de las personas, contribuir a preservar los activos ambientales, ampliar la cobertura del territorio bajo sistemas de ordenamiento urbano-territorial y promover el fortalecimiento de la infraestructura y los servicios de enlace y conectividad regionales.
Panorama social
De acuerdo con la dependencia, la región central del país cuenta con la más alta densidad poblacional, casi la mitad de las viviendas ocupadas y un amplio sistema de ciudades, lo que la convierte en la zona más urbanizada de la República. Estas características le otorgan importantes beneficios pero también retos en calidad de vida para sus habitantes.
El centro del país posee la mayor infraestructura educativa de nivel técnico, superior y de investigación, así como 45% de los hospitales del país, y cuenta con importantes zonas industriales y de servicios, además de aportar 51.1% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional.
No obstante, 35% de los trabajadores de la región se desempeñan en la informalidad, además de que la mitad de la población enfrenta niveles de ingreso, bienestar y desarrollo humano inferiores a la media nacional. Sin embargo, sólo 86 de los 777 municipios que hay en la región (11.1%) tienen un nivel alto o muy alto de marginación.
Asimismo, el centro del país enfrenta severos problemas ambientales, como un nivel importante de escasez de recursos hídricos, que se prevé se agudice, y constantes amenazas de sequías e inundaciones.
La creación del Instituto Nacional del Emprendedor, la ampliación de programas sociales y educativos, así como la construcción de infraestructura hidráulica como el Túnel Emisor Poniente II y diversas plantas de tratamiento, son algunos de los proyectos que el gobierno federal planteó para el actual sexenio con el fin de impulsar la región.