La reforma fiscal aprobada por el presidente Enrique Peña Nieto frenó los flujos de inversión de la compañías y el consumo de bienes y servicio del mercado mexicano, aseguró Guillermo Ortiz, presidente del Consejo de Administración de Grupo Financiero Banorte IXE.
“Hay empresas que están siendo afectadas por los cambios de las reformas estructurales y han dejado de invertir”, afirmó el empresario durante su participación en el foro México: Reformas y Oportunidades de Mercado, organizado por la Sociedad de las Américas y Consejo de las Américas y ProMéxico.
“Si ven las cifras de inversión privada global el año pasado el crecimiento fue nulo y el primer trimestre fue nulo, así como las cifras de ventas de la ANTAD van tres o cuatro meses con cifras negativas”, dijo el ex gobernador del Banco de México (Banxico).
La baja en el consumo no se había visto desde las crisis del 2009, cuando la economía mexicana se cayó 6%, afirmó el banquero.
“La reforma fiscal, no voy a decir mucho sobre la reforma fiscal, añadió un factor de incertidumbre enorme en las empresas”, declaró Ortiz Martínez.
Agregó que la reforma fiscal tiene aspectos contradictorios y el tema de incentivar la formalización no avanza; “afortunadamente como ya estoy en el sector privado ya puedo opinar de estos temas”.
Las reformas estructurales tienen impacto en el crecimiento económico de 2013 y 2014, debido a que hay sectores y empresas afectadas y han detenido sus inversiones, dijo Enrique de la Madrid, director general de Bancomext.
“Hay empresas que por sus sectores se están reformando o por su tamaño se saben futuros clientes de la Comisión de Competencia y hay empresas que dicen: Yo soy de los que me van a afectar”, manifestó el funcionario.
Señaló que algunas empresas con un mercado muy grande exploran otros mercados como Brasil y Austria para invertir.
“Los nuevos jugadores que entrarán al petróleo y las telecomunicaciones las reglas del juego no están escritas. La economía es reflejo es del cambio del juego”, añadió de la Madrid.