Los nuevos cuerpos policiales del estado mexicano de Tamaulipas, azotado por la violencia del crimen organizado, estarán listos en tres o cuatro años, afirmó hoy el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.
“Si no se apuesta a mediano y largo plazo para tener corporaciones bien formadas y capacitadas (…), que generen confianza en la población, no vamos a avanzar”, dijo en entrevista con Radio Fórmula.
El ministro presentó ayer una nueva fase en la estrategia de seguridad en ese estado del noreste de México fronterizo con Estados Unidos que prevé la “completa” depuración de los cuerpos de seguridad, buena parte de ellos infiltrados por el crimen organizado.
Señaló que en seis meses ya estarán capacitados los primeros agentes, mejores pagados y preparados, y estimó que “en tres o cuatro años” estarán listas las nuevas policías tanto a nivel estatal como municipal, así como de la fiscalía.
Osorio explicó que en la integración de las corporaciones de Tamaulipas tomarán en cuenta las experiencias exitosas de otros estados, como Nuevo León, Estado de México o Hidalgo, donde se creó una universidad para formar policías especializados en investigación.
Además, anunció que el titular de la Comisión Nacional de Seguridad (CNS), Monte Alejandro Rubido, será el portavoz oficial de todos los avances y acciones que se desarrollen en Tamaulipas, un estado que desde hace semanas vive una espiral de violencia.
En la nueva etapa en política de seguridad, el estado de Tamaulipas quedó dividido en cuatro regiones, dos controladas por la Secretaría de la Defensa (Sedena) y dos por la secretaría de Marina (Semar), a las que se sumarán las demás corporaciones.
A diferencia de Michoacán, donde el Gobierno asumió el control de la seguridad en enero, en el caso de Tamaulipas las tropas federales tienen ventaja porque ya se han capturado a 8 de los 12 principales objetivos, incluidos a los dos líderes más importantes de las bandas criminales que se disputan la zona, aseguró.
“Vamos a ir por unos y por otros” para acabar con la violencia y los enfrentamientos callejeros que afectan y causan temor entre la población, aseveró al aludir al Cártel del Golfo y a Los Zetas, que se disputan un territorio clave para sus negocios ilícitos.
Osorio adelantó que el Gobierno anunciará próximamente nuevas medidas para fortalecer la seguridad en la frontera sur del país, por donde cada año pasan unos 400,000 migrantes indocumentados, muchas veces víctimas del crimen organizado.