En México, la siembra de soya genéticamente modificada ha incrementado los rendimientos de los agricultores en 4.0 por ciento anual desde 2010, y se ha traducido en un ahorro en los costes de producción de los cultivos, según el informe “Cultivos GM: Impactos socio-económicos y ambientales 1996-2012”, publicado por PG Economics.

 

El reporte de la institución inglesa, especialista en biotecnología agrícola, revela que los rendimientos en dicha semilla observaron aumentos de 9.1 por ciento entre 2004 y 2005; de 3.64 por ciento en 2006; de 3.2 por ciento en 2007; de 2.4 por ciento en 2008 y de 13 por ciento en 2009.

 

Sobre la siembra de algodón genéticamente modificado, en los últimos cinco años, México mejoró sus rendimientos de entre 7.0 y 14 por ciento por el uso de tecnología en los cultivos, abunda la investigación.

 

El beneficio de los ingresos agrícolas en 2012 fue de 12.7 millones de dólares y el impacto en la producción total de algodón tuvo un aumento del 4.5 por ciento y desde 1996, el beneficio económico por la siembra de algodón transgénico suma 136.6 millones dólares a nivel nacional, de acuerdo con un comunicado de Agrobio.

 

La asociación que agrupa a las principales empresas desarrolladoras de la biotecnología agrícola, refiere también el reporte del “Impacto Global de los Cultivos Biotecnológicos de Brookes & Barfoot 2013”, en el que destaca que en México se generaron beneficios económicos por 141.6 millones de dólares en el periodo de 1996-2012, por la siembra comercial de algodón y soya genéticamente modificados.

 

Este estudio señala que, a nivel global, la biotecnología ha contribuido a reducir significativamente la liberación de emisiones de gas de efecto invernadero de las prácticas agrícolas.

 

Por otra parte, el informe de PG Economics señala que a nivel mundial, los agricultores que utilizaron semillas mejoradas y cultivos biotecnológicos obtuvieron beneficios económicos por 18.8 mil millones en 2012 de dólares y por 116.6 mil millones de dólares entre 1996 y 2012.