GINEBRA. La directora general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan, advirtió hoy que en el mundo actualmente circulan cuatro nuevos virus de naturaleza severa.
Chan hizo esta declaración al inaugurar la asamblea anual de la OMS, que reúne a los responsables sanitarios de 194 países.
Explicó que se trata del Síndrome Respiratorio de Oriente Medio por Coronavirus (MERS-CoV), con la mayoría de casos en Arabia Saudí y los Emiratos Arabes Unidos, de los virus H5N1 y H7N9 de la gripe aviar, y del ébola, del que se registra recientemente un grave brote en Guinea Conakry.
Prevenir la propagación de estas enfermedades es una de las preocupaciones centrales de la OMS, como también lo es mantenerse muy atenta y contener el avance de la polio, recalcó la responsable de la organización.
Hace tan sólo dos años la propagación de esta enfermedad entre países prácticamente se había detenido, pero su resurgimiento obligó hace dos semana a la OMS a declararla una emergencia sanitaria internacional.
La responsable de la institución explicó que las razones de esta reaparición con fuerza de la polio son las migraciones de poblaciones, los débiles controles fronterizos, la cobertura limitada de los programas de inmunización y los conflictos armados.
Los participantes en esta asamblea, que será presidida por primera vez por Cuba, debatirán asimismo sobre la mejor manera de detener el avance de las enfermedades no transmisibles, como la diabetes, las cardiopatías, el cáncer y las enfermedades pulmonares crónicas.
Chan dijo que “no hay evidencia de que la prevalencia de la obesidad y otras enfermedades no transmisibles relacionadas con la alimentación esté cediendo en alguna parte”, y advirtió que de que la obesidad infantil es un problema en aumento que representa un coste especialmente elevado.
Mientras esto ocurre en varias zonas del mundo, “hay otras donde la gente muere de hambre, la desnutrición sigue manifestándose como un problema”, en tanto que “la prevalencia global de la anemia apenas ha bajado”, dijo la jefa de la OMS.
Los miembros en pleno de la organización tienen hasta el próximo sábado para cumplir con una ambiciosa agenda y decidir asimismo sobre propuestas para mejorar la salud de los pacientes de hepatitis virales, lanzar un plan de acción sobre la salud del recién nacido y definir la manera de contener la resistencia a los antibióticos.
Uno de los objetivos más ambiciosos de la Asamblea Mundial de la Salud en los próximos días será sin duda lanzar una estrategia mundial y metas para la prevención, atención y control de la tuberculosis, un asunto que está centrando los esfuerzos de los delegados en Ginebra de Médicos Sin Fronteras.
Esta ONG anunció que pedirá a los ministros que sus gobiernos se centren en mejorar el diagnóstico y tratamiento de la tuberculosis resistente en los próximos meses.
En su intervención en la sesión inaugural de la asamblea, la directora general de la OMS también se refirió a las consecuencias negativas del comercio internacional y de los acuerdos que lo regulan en el ámbito de la salud.
Consideró que una de las tendencias más preocupantes es la negociación de acuerdos sobre inversión extranjera que “atan de manos a los gobiernos” en materia de salud.
Consideró que una muestra de que “algo está mal” es que se haya llegado al punto en que “una compañía puede denunciar las políticas que un gobierno adopta para proteger al público de un producto que mata”.
Chan hacía alusión así a la demanda que plantea la tabacalera Philip Morris contra Uruguay por su legislación antitabaco.