La economía mexicana necesita que las reformas estructurales ayuden a elevar el crecimiento de un 3.0 por ciento hasta un 5.0 por ciento, afirmó el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens.
En entrevista con el diario español El País, expuso que para mejorar el crecimiento económico de México “es de vital importancia que esas reformas progresen, que termine la legislación secundaria y que pasemos a la etapa de implementación”.
“México es un país que está en el proceso de implementar y tomar decisiones transcendentales para ser más productivo”, recalcó.
Recordó que si bien ya se hicieron las reformas constitucionales en materia de telecomunicaciones, competencia económica y energía, falta precisar detalles de las leyes secundarias.
Abundó que “el paquete de reformas es amplio e irá entrando de forma escalonada, y por lo mismo el impacto sobre el crecimiento será gradual, pero acelerado”.
“Los objetivos de crecimiento por encima del 5.0 por ciento deberían de estar en los años finales de esta Administración”, precisó.
Carstens aseguró que México se ha protegido contra los riesgos para evitar que las crisis afecten al país, por lo que “México ha construido para que las cosas le vayan bien”.
“Tenemos un marco macroeconómico sólido, hemos cubierto bien nuestras contingencias externas, tenemos un nivel récord de reservas internacionales, una línea de crédito flexible con Estados Unidos, un acceso inmejorable a los mercados financieros”, abundó.
Enfatizó que para generar más crecimiento es que se procede a las reformas estructurales.