EL CAIRO. El mariscal que en junio del año pasado encabezó el golpe militar contra el musulmán Mohamed Mursi triunfó en la segunda elección presidencial tras la caída de Hosni Mubarak con el 96.9% de los votos, lo que equivale a 2.9 millones de votos, menos de la mitad del padrón. Su rival, Hamdin Sabahi, acusó a las instituciones y a los medios de comunicación de alinearse con el militar electo.
Hamdien Sabahi obtuvo 754 mil 757 votos, el 3.1%, una cifra menor a la de votos declarados inválidos, que se cifraron en 1.28 millones, según la prensa egipcia. En una rueda de prensa, el candidato dijo que “no se puede dar ninguna credibilidad a las cifras de participación” facilitadas hasta ahora por las autoridades, que la sitúan en torno a un 46%.
Pese a la baja participación, la victoria de Al Sisi supera en número de votos a los 13.2 millones con los que ganó Mursi. Los resultados definitivos de los comicios se anunciarán el 5 de junio, mientras que la próxima semana Abdel Fattah al Sisi jurará el cargo y se espera que en julio se celebren elecciones parlamentarias.
Los Hermanos Musulmanes, que llamaron al boicot de los comicios, dudaron de la veracidad de los datos de participación y en su página web afirmaron que en realidad ésta fue de sólo el 11.92%
Al Sisi, de 59 años, vio aumentar su popularidad desde el derrocamiento de Mursi. Sus seguidores lo ven como la persona capaz de poner fin a la violencia y al declive económico que sufre Egipto desde hace tres años, cuando una revolución obligó a renunciar a Hosni Mubarak.
Los observadores electorales de la Unión Europea consideraron que las elecciones transcurrieron conforme con la ley, pero “en un entorno carente de principios constitucionales”.