A raíz de la captura de Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, la violencia en Sinaloa se recrudeció y los índices delictivos aumentaron, reconoció el gobernador de la entidad Mario López Valdez.

 

“Nosotros esperábamos que la cosa fuera peor desde esa detención, sí se nos ha recrudecido, pero pronto queremos tomar el control de nuevo”, subrayó el mandatario estatal, según publica el diario Noroeste.

 

Ayer en conferencia de prensa López Valdez explicó que la violencia en la entidad obedece a un reacomodo del cártel de Sinaloa tras la captura de El Chapo.

 

“Teníamos prácticamente ocho meses que los cierres que teníamos en esos ocho meses eran de menos de 100 homicidios, cuando en el 2010 casi tuvimos ocho meses con más de 200, este mes vamos a rebasar la cifra de 100”, señaló.

 

“Este mes en los últimos días se nos ha violentado un poquito el número de muertos, hemos tenido agresiones contra policías, hemos tenido agresiones contra militares, incluso muertos”, lamentó.

 

Adelantó que la próxima semana sostendrá una reunión con el comisionado nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido, para la estrategia de seguridad en el estado.