DALLAS, Texas.- Muy cara le salió la victoria a México sobre Ecuador, por 3-1 en Dallas. Luis Montes se perderá el Mundial y Rafael Márquez podría pasar por lo mismo si se confirma la gravedad de la lesión que lo llevó al hospital.
Al partido se lo llevó el diablo después de jugada media hora, justo cuando ocurrió la tragedia de Montes. El jugador que vino desde la División de Ascenso hasta la antesala del Mundial, y que después se anotar un gol lleno de belleza y la maldad necesaria para enviar el balón a torcer en el aire y burlar el lance del arquero. Era el minuto 32. Y en la siguiente jugada en la que participó, un choque con Segundo Castillo le rompió la tibia y el sueño de jugar en Brasil 2014.
Hasta ese momento México no estaba jugando mucho. Arriesgaba de más en la salida, mala idea ante un equipo de la corpulencia de los ecuatorianos, que robaban muchos balones en la media cancha y los llevaban adelante, aunque sin mucha fortuna.
Después de la lesión el partido continúo. Pero lo cierto es que ambos equipos jugaron más de media hora en estado de shock. No sólo Montes salió lastimado del choque con Castillo, el jugador ecuatoriano terminó en el hospital debido a que se lastimó los ligamentos de la rodilla derecha y es posible que también se pierda el mundial.
Es caprichoso el destino. Los dos jugadores formaron parte del Pachuca. El año en el que los Tuzos mandaron al pequeño Montes al León, a jugar en la División de Ascenso, contrataron a Castillo, quien venía con una trayectoria europea.
Como en todo, unos caen y otros tienen la suerte de estar ahí cuando se les requiere. Marco Fabián anotó un golazo para poner a México 2-0 en el marcador, y se le vio incisivo jugando en el puesto del de León. Pero ya sabemos cómo es Marco, no corre igual, no marca y su entrega es intermitente. El hueco de Montes es difícil de cubrir.
Pero si ese es complicado, imaginen lo que significaría, de confirmase, la ausencia de Márquez. México no tiene centrales, tan así es que Miguel Herrera no encontró a quién llevar en lugar del Maza Rodríguez, y ahora lo vamos a ver de titular en la Copa del Mundo. Y el otro, al que parecía que no iba a llamar, Carlos Salcido, será titular también.
El tercero lo consiguió Giovani dos Santos, también un gol desde lejos y con enorme clase.
Al final acortó distancias Enner Valencia, en un tiro que desvió la defensa mexicana y terminó en la red sin que Guillermo Ochoa, poco exigido en el duelo, pudiera hacer cualquier cosa.
Un partido no sólo inútil, sino en el sentido que podemos darle a la palabra en el deporte, trágico, fuimos testigos en el ATT Stadium de Dallas.