La Cruzada contra el Hambre ha permitido que tres millones de mexicanos en condiciones de pobreza alimentaría tengan apoyo, y la meta, señaló el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, es que a finales de 2014, 5.5 millones de ciudadanos tengan seguridad alimentaria.
En la localidad rarámuri de Guachochi, Chihuahua, el mandatario puso en marcha el mes de la Cruzada contra el Hambre y manifestó que cuando tomó las riendas del gobierno federal, 7.5 millones de personas carecían de los ingresos mínimos para alimentarse, y tras año y medio de política social, son tres millones los que han sido beneficiados.
Los programas de asistencia social como el seguro para Jefas de Familia, la Pensión a Adultos Mayores, los Comedores Comunitarios, Oportunidades, la tarjeta Sin Hambre, entre otros, explicó el Presidente tienen un presupuesto global de 346 mil millones de pesos para este año.
La estrategia del gobierno federal va enfocada a los 400 municipios con mayores índices de marginación, “de manera muy focalizada, una de las tareas que teníamos muy claras era atender a siete millones de mexicanos que padecen hambre y no tienen garantizado el abasto alimentario todos los días, que enfrentan desnutrición”.
Peña Nieto apuntó que el mes de la Cruzada Nacional contra el Hambre “es un llamado a toda la sociedad mexicana de consciencia social, de responsabilidad para con aquellos que más lo necesitan y los que menos tienen”.
A su parecer, “era inadmisible que para un país que se quiere proyectar al mundo por su modernidad, por su condición de fortaleza, por su desarrollo económico, era inadmisible que tengamos a siete millones de mexicanos sin alimentación, por eso la razón de haber emprendido esa cruzada”.
Como parte del plan antihambre, dijo, “nos hemos propuesto en 2014 pasar de tres millones de familias que hoy tienen alimentación a más de 5.5 millones de personas beneficiadas, con lo cual, no estaremos acercando a la meta”.
Los programas de asistencia social tienen nuevos elementos en sus reglas de operación, “con el objetivo de darle el perfil de programas sociales de nueva generación, que no sólo lleven ayuda, sino que la población beneficiada encuentre elementos de apoyo y de respaldo para incorporarse a la actividad productiva”.
IVA en alimentos hubiera sumado 14 millones de pobres
El Impuesto al Valor Agregado (IVA) en alimentos y medicinas hubiera causado que 14 millones de mexicanos se sumaran a la pobreza en este 2014, reconoció Rosario Robles Berlanga, titular de la Secretaría de la Sedesol.
Al presidente Enrique Peña Nieto la funcionaria le dijo: “usted puso como prioridad combatir el hambre y por eso decidió no proponer al Congreso el IVA a alimentos y medicinas, eso hay que decirlo muy fuerte, significaría más hambre y más pobreza, de acuerdo al Programa para el Desarrollo de las Naciones Unidas, 14 millones de mexicanos hubieran caído en la pobreza porque golpea a la economía familiar”.
De visita en la Sierra Tarahumara para poner en marcha el Mes de la Cruzada contra el Hambre junto al presidente Enrique Peña Nieto, la ex perredista señaló que la estrategia de política social del gobierno federal busca el trabajo unificado desde el ámbito municipal, “independientemente de colores partidarios”.
A su parecer, “aprendimos que sólo con la participación de todos era posible que los siete millones de mexicanos que se encontraban en pobreza alimentaria pudieran ejercer el más elemental de los derechos, el acceso a la alimentación”.
La encargada del sector social en el gobierno de Peña Nieto aseguró que los gobiernos locales y los beneficiarios de los programas “son testigos que en esta cruzada no ha habido ningún condicionamiento de tipo político”.
Entre los logros de la Cruzada, resaltó, el programa Oportunidades “ha llegado por primera vez a más de 30 mil localidades alejadas y marginadas a las que nunca había llegado ningún programa social”.