CHICAGO,Illinois. Puros retazos de la derrota mexicana ante Bosnia-Herzegovina quedaron en el vestidor del Soldier Field.
Incluso un marranito dibujado en la pizarra donde Miguel Herrera dejó parte del parado de sus verdes.
CHICAGO,Illinois. Puros retazos de la derrota mexicana ante Bosnia-Herzegovina quedaron en el vestidor del Soldier Field.
Incluso un marranito dibujado en la pizarra donde Miguel Herrera dejó parte del parado de sus verdes.