EL CAIRO. El ex jefe del Ejército Abdel Fattah al Sisi tomó posesión como nuevo presidente de Egipto en la sede del Tribunal Constitucional Supremo, en El Cairo.
“Juro por Dios guardar lealtad al régimen de la república, respetar la Constitución y la ley, proteger los intereses del pueblo en su totalidad y preservar la independencia de la patria, su unidad y la integridad de su territorio”, dijo en su proclamación Al Sisi.
El nuevo jefe de Estado, vencedor en las elecciones presidenciales celebrados en mayo con un 97% de los votos, tomó así el relevo del mandatario interino, Adli Mansur, que volverá a su puesto como presidente del Tribunal Constitucional que desempeñaba hasta la destitución militar del islamista Mohamed Mursi el pasado julio.
Al Sisi calificó de histórico y sin precedentes el traspaso de poder “democrático y pacífico” entre su predecesor, Adli Mansur, y él mismo.
En una breve alocución en el palacio presidencial de Itihadiya, Al Sisi recordó que nunca antes se había firmado en Egipto un documento en el que un presidente transfiere el poder al otro.
“Tengo la intención de abrir una etapa de construcción para que el país se levante interna y externamente”, dijo Al Sisi, antes de apuntar que trabajará para que Egipto “recupere su papel de liderazgo regional e internacional para compensar lo que hemos perdido y corregir lo que hemos errado”.
Vestido con traje y corbata azul oscuro, Al Sisi juró su cargo ante los magistrados del Constitucional y un grupo de invitados, entre quienes estaban los miembros del actual gobierno, que dimitirá en bloque, personalidades políticas y religiosas, y su familia.
En tanto, ciudanos egipcios celebran en las calles de El Cairo la proclamación del general Al-Sisi. (EFE)