La infertilidad en los hombres es un problema que puede prevenirse y resolverse con el simple hecho de cambiar algunos factores de la vida cotidiana, como llevar una dieta más saludable, hacer ejercicio y dejar de consumir productos nocivos como alcohol y tabaco.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que 40% de los casos de infertilidad es responsabilidad del hombre, cuando éste tiene dificultades en hacer que una mujer quede embarazada después de haberlo intentado por lo menos un año.