SAO PAULO.- El técnico Luis Felipe Scolari decidió no abandonar la concentración de Brasil pese a la muerte de su sobrino en un accidente de tráfico ocurrido el martes.
Scolari compareció el miércoles en la rueda de prensa oficial de la FIFA en Sao Paulo y no viajó para acompañar a su familia en el sur de Brasil, donde Tarcisio Joao Schneider falleció el martes a los 48 años. Asimismo, “Felipao” se hizo cargo de la práctica del equipo en el estadio Itaquerao, donde Brasil se enfrenta a Croacia este jueves.
Scolari explicó que ha encontrado fuerzas para seguir trabajando al ver la dedicación y la intensidad de sus jugadores ante el inminente debut.
“Hallo la fortaleza al trabajar con este grupo, en este ambiente, donde los jugadores se dedican a su meta día tras día”, dijo Scolari. “Esto me ayuda a dejar atrás la tristeza y a aferrarme a las cosas positivas que pasan”.
El técnico fue notificado sobre la muerte de Schneider justo antes de la práctica del martes en Río de Janeiro, una de las últimas antes del cotejo inaugural.
“Algunas veces hay que afrontar algunas dificultades, pero hay que intentar mirar adelante”, dijo el técnico.
El hermano de Schneider, Darlan, fue preparador físico de Brasil cuando la selección, dirigida por Scolari, conquistó el Mundial de 2002 en Corea del Sur y Japón.
La policía de caminos en el estado de Río Grande do Sul informó que Schneider, hijo de una hermana de Scolari, falleció cuando el auto que conducía chocó de frente con un camión.