EL CAIRO. El delegado permanente de Irak en la Liga Árabe, Qais al Azaui, aseguró hoy en declaraciones a los periodistas que su país no necesita ayuda militar extranjera para detener el avance de las fuerzas terroristas radicales suníes.
Al finalizar la reunión de los delegados permanentes de la organización panárabe, Al Azaui negó que su país haya pedido ayuda militar extranjera y explicó que Bagdad no tiene necesidad de apoyo para frenar a los terroristas.
Azaui hizo hincapié en el respeto a la integridad territorial de Irak y rechazó cualquier injerencia en sus asuntos internos.
Además, reconoció la existencia de dificultades, que no concretó, para alcanzar una posición común árabe sobre la grave situación actual de Irak.
“Todos los árabes están de acuerdo en la lucha contra el terrorismo, pero existen detalles sobre cómo llevar algunos temas políticos”, añadió.
Irak se encuentra sumido en un conflicto armado desde la semana pasada, cuando insurgentes suníes liderados por el Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL) iniciaron una ofensiva en el norte del país.
Los rebeldes han tomado el control de varias localidades, entre ellas Mosul, la segunda ciudad del país, y amenazan con avanzar hasta Bagdad y los santuarios chiíes de Kerbala y Nayaf, lo que ha despertado nuevos temores a un conflicto sectario a gran escala.