El gobierno de México a través por la Secretaría de Relaciones Exteriores, condenó las ejecuciones sumarias y los asesinatos extrajudiciales efectuados en la provincia de Saladio, Irak.
“México reitera que el derecho internacional expresa que, aún en casos de conflicto armado, la vida y los derechos humanos de los prisioneros deben ser garantizados”, señala el texto.
El gobierno mexicano reiteró su solidaridad con el pueblo y el gobierno de Irak “ante este repudiables sucesos”, aparentemente perpetrados por integrantes del llamado Estado Islámico de Irak y el Levante.