MADRID. En pleno debate en torno al referéndum para elegir el modelo de estado de España, entre monarquía y república, el protocolo ocupa un destacado papel a la hora de girar la balanza en el afecto por la monarquía española. El futuro rey Felipe VI, tiene muy claro que la monarquía debe evolucionar y adaptarse a los tiempos actuales. El protocolo es la herramienta para conseguirlo.
Mañana se llevará a cabo la proclamación del rey Felipe VI y 24HORAS ha hablado en exclusiva con una de las personas que más sabe de protocolo en España: Carlos Fuente, Jefe de Protocolo de la Fundación Príncipe de Asturias desde 1998 hasta 2013. Actualmente es vicepresidente de la Asociación Española de Protocolo y dirige el Instituto Universitario de Protocolo, de la Universidad Camilo José Cela.
– El Rey Juan Carlos I no asistirá a la proclamación de su hijo, el nuevo Rey Felipe VI. ¿Así lo establece el protocolo?
– La costumbre en España es suceder el reinado cuando fallece el monarca, por lo que habría que remontarse en la historia para ver si hay una caso como el de la abdicación actual. Desde el punto de vista institucional, la decisión del Rey es acertada. La presencia del Rey Juan Carlos iba a quitar solemnidad al acto. Seguro que supondrá un sacrificio personal pero evitará comparaciones e incluso problemas de protocolo.
– No asistirá al Congreso pero en el Palacio Real tendrá lugar una ceremonia donde se podrá ver juntos a Don Juan Carlos y al futuro Rey.
– En efecto, en el momento en que Don Juan Carlos le imponga el Fajín de Capitán General del Ejercito de Tierra y concurran juntos, será la foto testimonial donde el Rey le entrega a su hijo el símbolo que representa el traspaso de poderes.
– La vestimenta que ha escogido el futuro Rey Felipe VI en la ceremonia de Proclamación será militar. ¿Sería más adecuado vestirse de civil?
– El acto es una ceremonia civil y lo lógico es que vistiese como tal, pero es una decisión personal y tiene la potestad para ir de militar pues el Rey es el mando supremo de las Fuerzas Armadas. Su padre el Rey Juan Carlos I vistió de Capitán General en su proclamación como Rey en 1975. En el caso de Don Felipe, ha pesado su sentido de pertenencia a la carrera militar. Es una decisión que hay que respetar.
– ¿Qué dice la etiqueta en cuanto a la futura reina Letizia? ¿Cómo debe ir vestida el día de la Proclamación?
– Hay un asunto protocolario en que si el Rey va vestido de gala, ella tiene que ir de largo, con un vestido que llegue hasta los pies. En cuanto al color de su vestimenta, deberá ir en tonos discretos ya que juega un papel secundario, que es acompañar al nuevo Rey.
– España es un país católico y sin embargo en la Proclamación no habrá ceremonia religiosa. ¿Saltarán las alarmas en la sociedad católica?
– Es una novedad y un avance que sea la primera vez que un Rey no jure ante ningún elemento religioso. Existía una tradición por la que pasados unos días de la Proclamación se celebraba una misa llamada “Misa del Espíritu Santo”, pero el Príncipe Felipe ha optado por quitar toda la simbología religiosa, como prescindir del crucifijo junto a la Constitución. El estado español es un estado aconfesional y no debería utilizarse ningún símbolo religioso porque de acuerdo a la Constitución Española, no sería laico. No tendría sentido que en España de 2014 se celebrase una misa oficial.
– ¿Hay que ajustar el protocolo a los nuevos tiempos, a las nuevas generaciones o por el contrario es inamovible?
– El 90 por ciento de las normas de protocolo no se regula por la ley. El protocolo no tiene ningún sentido sino responde a las necesidades de cada momento. Antes creaba muchas barreras entre los poderosos y los ciudadanos, ahora se trata de acercar y evolucionar. A España le viene muy bien desprenderse de la idea de que el protocolo es rígido. Este Príncipe ha dado síntomas claros de que a el le gustaría que fuese más cercano. Ahora con más motivos ya que como reflejan las encuestas, hay miles de personas que están a favor de un referéndum para que cambie el modelo de estado. Don Felipe tiene que hacer una importante labor para que las monarquías modernas sean validas. Si la monarquía es rancia y antigua está condenada a morir. Ellos desde el día de su Proclamación se van a ir ajustando a los tiempos.
– La Real Academia Española (RAE) define la palabra protocolo, como “Regla ceremonial diplomática establecida por decreto o por costumbre”. ¿Quién decide esos decretos o esas costumbres?
– Esta definición hay que revisarla de manera urgente, pues es una definición profesional y fuera de contexto, que no responde a la realidad del protocolo hoy. El protocolo es una regla que se dispone por una norma y unas costumbres, pero es mucho más que unas directrices. Es un instrumento que permite la comunicación. En cualquier caso, el establecimiento de las normas relativas al protocolo es de los gobiernos, que son los que establecen las normas de protocolo.