MOSUL. El Gobierno de Bagdad envió a Tal Afar fuerzas antiterroristas y unos 2 mil voluntarios para combatir contra el EIIL, quien el lunes pasado tomó el control de esa localidad, ubicada entre la ciudad iraquí de Mosul y la frontera con Siria.
La fuente explicó que las fuerzas gubernamentales, también apoyadas por elementos tribales armados, consiguieron expulsar a los combatientes del EIIL de algunos barrios de Tal Afar, entre ellos Al Mualimin y Al Jadrá.
Añadió que los enfrentamientos dejaron unos ochenta muertos en el castillo de Tal Afar y otros veinticuatro en las zonas de Al Saraya y Al Basatin, en el sur y este de la localidad, respectivamente.
Entre los fallecidos, aseguró, hay milicianos saudíes y de otras nacionalidades árabes.
Por otro lado, el vicepresidente del Consejo de la provincia septentrional de Nínive, Nur al Din Kablan, explicó a una fuente que la localidad de Tal Afar está viviendo “una situación trágica debido a los bombardeos indiscriminados de las fuerzas gubernamentales y de los grupos armados en la ciudad”.
Kablan cifró en más de cincuenta los civiles muertos y en un centenar los heridos por bombardeos en esa localidad.
Además, dijo que miles de familias han tenido que abandonar Tal Afar y desplazarse a la ciudad de Sinyar, ubicada también en la provincia de Nínive, y a la región del Kurdistán iraquí.
El EIIL, que ya controla Mosul, la segunda ciudad de Irak, tomó el lunes Tal Afar dentro de su plan para crear un emirato islámico en Irak y Siria.
El grupo radical, que lidera la insurgencia suní en ese país, amenazó con continuar hacia Bagdad y las ciudades santas chiíes de Kerbala y Nayaf, en el sur de Irak, donde aseguró que destruirá todos los santuarios de esa confesión religiosa.
Pero Tal Afar no es la única zona gobernada por la incertidumbre; hombres armados tomaron el control de un puesto fronterizo con Siria ubicado en la provincia de Al Anbar, en el oeste de Irak.
Los atacantes, que se cree que pueden ser rebeldes que combaten en Siria, cruzaron la frontera y tomaron los equipos y vehículos del puesto de control de Al Qaem, en Al Anbar.
Según las fuentes, el ejército iraquí, apoyado por combatientes tribales armados, se está preparando para recuperar el puesto.
El director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, Rami Abdurrahman, explicó a una fuente que en la parte siria de la frontera se han registrado choques entre el extremista Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL, también conocido como ISIS por sus siglas en inglés) y milicianos tribales en el pueblo de Al Bukamal, en la provincia siria de Deir al Zur.
Resulta que milicianos chiíes iraquíes que luchaban junto a las tropas del régimen de Bachar al Asad en Siria se han retirado a su país de origen para combatir al grupo radical suní Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL o ISIS, en sus siglas en inglés).
Rami Abderrahman, dijo que muchos combatientes iraquíes que apoyaban a las fuerzas gubernamentales en la periferia de Damasco han regresado a Irak después de que el EIIL tomara el pasado día 10 la localidad de Mosul, la segunda ciudad del país.
Por este motivo, el ejército sirio ha disminuido sus operaciones en la zona de Meliha y sus alrededores, al norte de Damasco, aunque sus aviones han seguido bombardeando el área.
Desde Brasil, el vicepresidente estadunidense, Joseph Biden, declaró que “Estados Unidos apoya al Gobierno iraquí y a las comunidades iraquíes en sus luchas. En las últimas semanas hemos conversado con varios países amigos, incluso sobre una posible ayuda urgente para enfrentar las actuales amenazas.